
Aunque todo es cosa del pasado, considerando que Al Horford ya firmó para jugar con los Golden State Warriors las próximas dos temporadas, el veterano pívot recientemente reveló más detalles sobre su decisión de dejar el equipo y la ciudad que consideró su hogar durante siete años: los Boston Celtics.
A decir verdad, Horford nunca quiso jugar en otro lugar que no fuera Beantown y para los Celtics, equipo al que ayudó a liderar a la cima de la NBA en 2024.
Sin embargo, la rotura del tendón de Aquiles de Jayson Tatum y los movimientos posteriores le dejaron claro a Horford el rumbo que tomaría el equipo. Y a los 39 años, sabía que la oportunidad de competir por otro título no estaría ahí con los Celtics.
Los Celtics no pudieron ofrecerle lo que quería
Horford se sentía cómodo en Boston y creía tener todo lo que necesitaba y deseaba allí. Tenía un rol definido y numerosos jugadores jóvenes que podían ayudar a llevar la carga. Pero cuando Tatum sufrió una lesión devastadora en la postemporada, se hizo evidente que el equipo estaba en constante cambio. Con su propia carrera llegando a su fin, Horford sabía que necesitaba encontrar un nuevo hogar donde pudiera seguir compitiendo al máximo nivel.
"Creo que donde estaba Boston como equipo, aunque los consideraba mi hogar y tenían todo lo que necesitaba, simplemente no estaban en condiciones de ofrecerme la oportunidad que quería", dijo Horford en una conversación con The Athletic.
Aunque sus promedios de la temporada pasada (9.0 puntos, 6.2 rebotes, 2.1 asistencias) no son precisamente de superestrella, gran parte de lo que Horford hace por cualquier equipo en el que juega no se refleja necesariamente en las estadísticas. Ya sea poniendo bloqueos sólidos, defendiendo con firmeza o dando el pase preciso en el momento oportuno, el liderazgo veterano de Horford y su alto nivel de baloncesto han sido invaluables para el éxito de su equipo.
Desafortunadamente, los Celtics no contaban con los recursos económicos para ofrecerle a Horford más que el mínimo para veteranos; esa fue una de las razones por las que decidió irse.
El segundo factor, y el más importante, fue la capacidad del equipo para competir por campeonatos. Dado que es poco probable que Tatum juegue esta temporada, los Celtics se quedan con un equipo liderado por el All-Star Jaylen Brown, el escolta Derrick White y el tenaz base Payton Pritchard, un grupo que difícilmente podría ser considerado un campeón.