En asuntos políticos nuestro país es único en el mundo, no solo de forma sino también de fondo, la desnaturalización del ejercicio político nuestro es un aspecto que marca el accionar de la partidocracia y sus líderes más influyentes.
En materia de liderazgos y coyunturas políticas en países avanzados, los actores del sistema al perder un certamen electoral o terminar un mandato al frente del gobierno se retiran.
Pero la idiosincrasia de este país caribeño dispone de un liderazgo tan especial que su práctica es replicada hasta en clubes, junta de vecinos, ligas deportivas, asociaciones, sindicatos y colegios profesionales, nadie renuncia ni cede, todo lo contrario, tratan de perdurar en el tiempo a como dé lugar.
Dicho en otros términos, si tomamos en cuenta el gobierno del ingeniero agrónomo Hipólito Mejía, este gobernó el país en el periodo desde el 16 de agosto de 2000 hasta el 16 de agosto 2004, pero la ambición y el síndrome de ‘’yo o que entre el mar’’ lo embarcó en un proceso de reelección que perdiera frente a Leonel Fernández, sin embargo, Mejía sigue activo en la vida política nacional sin obrar fuera del recipiente y a lo interno de su partido cuenta con grupos que le siguen.
En tanto el expresidente Leonel Fernández fue presidente de la República Dominicana de1996 al 2000, de 2004 al 2008 y de 2008 al 2012, como podemos observar tres periodos al frente del Estado de tres.
Tres es un bagaje envidiable con esta hazaña, y luego de salir de las filas del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) crea la Fuerza del Pueblo para insistir en las aspiraciones de conducir la nación nuevamente sin pensar jamás en llevar a cabo el retiro de la política y endosar su liderazgo.
En el caso de Danilo Medina dirigió el país desde el 16 de agosto de 2012 hasta el 16 de agosto de 2020, habiéndose reelegido en 2016, con un intento fallido de reformar la constitución dominicana para apostar a un tercer mandato.
Pero aún después de las elecciones del año pasado, Medina sigue constituido como el ente principal de su partido el PLD, no solo como presidente de la organización, sino que mantiene la hegemonía dentro de ese partido.
Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina han dirigido los destinos de la nación en los últimos 24 años hasta la llegada al poder del presidente Luis Abinader, y por el momento ninguno de los tres expresidentes está incesante de la política nacional nuestra, al parecer apuestan a la jugada de los tres caudillos pasados Juan Bosch, Joaquín Balaguer y José Francisco Peña Gómez, que solo la muerte los jubiló.