SANTO DOMINGO.-El expresidente Hipólito Mejía se declaró ayer enemigo de que se investigue y condene, en caso de que lo requieran sus actos, a expresidentes de la República.
Indicó que considera tales actos como retaliación y aseveró que la misma se trata de una convicción muy personal.
“A mí me hicieron muchas críticas porque cuando me llevaron el caso de Leonel Fernández con la famosa fundación Global y otras cosas más yo dije que eso no era verdad”, indicó Mejía.
Declaró que nunca fue bochista o balaguerista, pero que después fue de ambos cuando asumió la Presidencia.
Ya ellos estaban enfermos y fui su hijo, su presidente y me involucré con sus hijos y empleados, dedicándole tiempo a ambos. Iba a la casa de Bosch cada quince o treinta días y en el caso de Balaguer mis pleitos del pasado se redujeron a la nada”, rememoró Mejía.
Reiteró que los expresidentes deben tener privilegios y que lo ocurrido en otros países al momento de su gobierno decidió no replicarlo. “Les dije a los gringos que no iba a aplicar esa fórmula aquí”.
Pedido del PLD
— Contexto
El Partido de la Liberación Dominicana ha exigido al Ministerio Público que de tener algo en contra del expresidente Danilo Medina, lo presente. Se quejan de asedio judicial.