Es el trastorno del deseo sexual hiperactivo. Condición en la cual una persona no está satisfecha jamás con los encuentros sexuales que mantiene y siempre demanda mayor frecuencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la cataloga como un impulso sexual hiperactivo o conducta sexual compulsiva.
Este trastorno se caracteriza por pensamientos obsesivos en relación a la expresión sexual, compulsión por realizar actividades sexuales, pérdida de control de los hábitos sexuales o sea, desregulación sexual (expresión impulsiva y exagerada de los impulsos sexuales).
Algunas personas que la padecen son hedonistas. Su tendencia de buscar el placer en todos los ámbitos de la vida, las lleva también a buscarlo en su vida sexual como finalidad de disfrutar de los placeres intentando evitar el dolor. También se asocia a la ansiedad como causa y otras veces, la ansiedad es que lo causa.
Aunque generalmente la causa es psicológica, es importante descartar la causa orgánica. Ya que trastornos endocrinológicos, por ejemplo, podrían provocar un aumento exacerbado de hormonas masculinas, al producirse ciertas patologías en algunas glándulas y provocar la hipersexualidad.
Este trastorno provoca disfunciones en la vida cotidiana de la persona y de la pareja. Si no tiene pareja, saldrá a buscar a otras personas para satisfacer su demanda sexual y estará expuesto a Infecciones de Transmisión Sexual frecuentemente y otras situaciones.
Si tiene pareja y está no tiene la libido exacerbada, se cansará en algún momento de ser demandada con tanta frecuencia y hasta podría desarrollar una disfunción de deseo sexual hipoactivo. Si se identifica busque apoyo profesional.