Hay que estar vivo, para ver...

Hay que estar vivo, para ver…

Hay que estar vivo, para ver…

Hugo López Morrobel

Hay acontecimientos que sacan a cualquiera de sus cabales, porque no le encuentro explicación lógica a la decisión adoptada por el dirigente de los Yanquis de enviar a ligas menores al pícher dominicano Jhony Brito, quien en su debut el pasado domingo tiró un “juegazo” al lanzar cinco entradas sin anotaciones, con cinco ponches y apenas una base por bolas.

En momentos en que los lanzadores de calidad son más escasos, y tras una labor de esa naturaleza, debe ser un momento frustratorio, recibir la noticia de que iría a las menores.

Situaciones de esa naturaleza no son normales en estos tiempos, pero al puertoplateño Brito no le ha quedado de otra que admitir y asimilar con una “sonrisa” la decisión inesperada adoptada por el dirigente Aaron Boone.

Los multiusos
Desde su ascenso al poder, el presidente Luis Abinader ha estado cortando cintas en todo el territorio nacional, tras el remozamiento de multiusos que se encontraban en estado bastante deplorables.

Es una lástima que obras de primer nivel se hayan dejado abandonadas, tras grandes esfuerzos para construirlas.
El abandono de obras tan importantes para millones de deportistas es producto de la irresponsabilidad de las autoridades, pero también de los dirigentes de esas demarcaciones.

Para lograr esas instalaciones, pasadas y presentes generaciones hicieron un tremendo esfuerzo para ver que hoy están en completo abandono, lo que es sencillamente penoso.

El Ministerio de Deportes debe realizar acuerdos con los ayuntamientos para que estos sean también responsables del cuidado de esas instalaciones.