Fútbol en duelo/Zagallo y Backenbauer

Fútbol en duelo/Zagallo y Backenbauer

Fútbol en duelo/Zagallo y Backenbauer

Dimaggio Abreu.

Recién el sábado 6 de enero falleció el brasileño Mario Jorge Lobo Zagallo y tan pronto como el lunes 8 partió el alemán Franz Anton Beckenbauer, dos de tres hombres que coronaron el Mundial de Fútbol como jugador y como entrenador, por cuanto, indiscutiblemente, el balompié inicia el 2024 en estado de duelo.

Lobo Zagallo (Lobo es apellido por la madre) es el único que logró el tetracampeonato del mundo: como jugador en Suecia 1958 y Chile 1962; seleccionador en México 1970; y coordinador de la selección en 1994, lo cual le convierte en alguien excepcional. Contaba con 92 años.

En Suecia ‘58 donde irrumpió “la Perla” de 17 años, Pelé, debutante junto a Garrincha como titulares a partir del tercer partido para unirse a estelares como Didí, Vavá y Nilton Santos entre otros, Zagallo no fue uno más del onceno. Con él, el entrenador Vicente Feola cambió su cuadro táctico de un 4-2-4 al 4-3-3.

La innovación táctica consistió en colocar a Zagallo como un “delantero retrasado” que en ataque avanzaba por la izquierda y al perder el balón regresaba a defender al medio campo a recuperar pelotas con gran efectividad. Todo ello, gracias a su excelente estado física.

El “Viejo Lobo” visitó la capital dominicana el 28 y 29 de junio de 2004 con la entonces selección campeona del mundo. En la última fecha realizó un entrenamiento con vistas a un partido amistoso el día 30 con la selección de Haití en Puerto Príncipe. Finalizado el entrenamiento, con el experto en fútbol y fraterno Félix Disla Gómez, flanqueamos a Zagallo en una entrevista mientras salía del campo del hoy Estadio Olímpico Félix Sánchez.

“El Káiser” Beckenbauer es tenido como la máxima figura del fútbol de Alemania y uno de los mejores de la historia a nivel mundial. Como jugador ganó la Copa del Mundo en 1974 y como seleccionador la de 1990, con lo que se unió a Zagallo en esos logros. El tercero es el actual DT de Francia Didier Deschamps, en 1998 vestido de corto y en 2018 como entrenador.

Beckenbauer fue un jugador líbero, una posición defensiva de la que fue su máximo referente, habitual en la década de 1970 y que no se usa en estos tiempos. Su versatilidad era incomparable, con elegantes transiciones desde la defensa hasta la zona de ataque, con control impecable de balón, lo que lo convirtió también en buen goleador.

Su palmarés fue primoroso. En 1972 ganó la Copa de Europa con la selección; con Bayern Múnich logró cuatro Bundesligas, tres Copas de Alemania y una Intercontinental. Como entrenador del equipo muniqués ganó la Bundesliga de 1994 y la Copa UEFA en 1996. Con el Cosmos de Nueva York obtuvo tres Ligas de la American Soccer League. A su retorno a Alemania, se anexó una quinta Bundesliga, esta con el Hamburgo.

Con la partida de Lobo Zagallo y “El Kaiser” (Emperador) Beckenbauer con un día de por medio, es indiscutible, el fútbol mundial está de duelo.