SANTO DOMINGO.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) pronosticó que la crisis inflacionaria se mantendrá durante el 2022 lo que generará malestar y desestabilización social en países con economías emergentes y en recuperación tras los efectos adversos de la pandemia como lo es, por ejemplo, la República Dominicana.
«Aunque los precios de los alimentos se han moderado recientemente, esto podría cambiar en los próximos meses. Dicho cambio se sumaría a los altos precios que los consumidores ya han vivido», aseguran los economistas del FMI.
En términos similares se expresó el economista Juan del Rosario quien afirmó que no hay forma de que la crisis se elimine en el corto plazo, por lo que el gobierno dominicano está en una especie de trampa.
“Tenemos problema del alza y los retrasos en los fletes internacionales que están provocando costos financieros elevados para las empresas en termino de capacidad de almacenamiento. Segundo, estas comprando materias primas en alza y tercero el precio del petróleo que también está aumentando. En el caso de nosotros tenemos un cuarto elemento que tiene que ver con la capacidad local de producción”, dijo Del Rosario.
Indicó que al gobierno central le resta tratar de seguir incentivando los productores locales con financiamiento y precios de sustentación porque todo parece indicar que la política de contrarrestar los déficits de producción local con importaciones no da resultado.
“No da resultado porque los productos que se están trayendo no son suficientes, lo otro es que para que esos precios de bienes importados puedan competir y presionar a la baja a los precios locales, tienen que ser adquiridos en mercados internacionales a bajos precios y eso no existe”, declaró el economista.
Expresó que en el fondo, lo que el gobierno está haciendo es subsidiando esos precios lo que tendrá una repercusión en el déficit fiscal.
“El gobierno debe seguir apostando para sortear la crisis pero consciente de que estas alzas de precio van a continuar sobre la economía. El salario del 14% hace tiempo que se erosionó y apenas estamos hablando de dos meses desde que se anunció el aumento”.
Explicó que las alzas anunciadas en el sector eléctrico aporta un elemento de presión a todo el tema de la inflación en el mercado local.
“Eso tendría un efecto depresivo sobre la demanda y la gente tendría menos dinero para comprar otros servicios y los precios pudieran estar bajando lo que no es bueno, porque en una reactivación de la economía podría tener un efecto adverso y deprimir esa recuperación y no lograr los índices que se esperan para final de año” aseguró Rosario.
Amnistía al pago de aranceles
El también economista, Antonio Ciriaco, dijo que ante la actual crisis, el gobierno tendrá que establecer una especie de amnistía temporal a los aranceles de los alimentos para que esto amortice el costo de la canasta básica familiar.
“El aumento salarial que se hizo es insuficiente porque las tendencias alcistas de los commodities seguirán afectando los costos de la producción y de los alimentos. Según el Banco Central, la inflación de los alimentos es más alta que la inflación general y esto afecta a los sectores vulnerables que están en el primer y segundo quintil”, indicó Ciriaco.