Nagua.-A medida que avanzan las horas los vientos son más intentos, las lluvias más fuertes y el mar aumenta la marea mientras en algunos sectores y esquinas de Nagua se observan grupos de personas pasando el tiempo y compartiendo algunos tragos.
En el pueblo se están cayendo los letreros, propiedades cercadas con zinc están quedando al descubierto, mientras la Defensa Civil recorre activamente las diferentes comunidades cortando ramos caídos en las vías, levantado letreros y orientando a las personas.
Es a partir del incremento de las lluvias cuando en los sectores vulnerables crece la preocupación por el riesgo de inundación, aunque nadie quiere salir de su casa.
El director provincial de la Defensa Civil, Franklin Taveras, junto a su equipo de hombres y mujeres, recorren sectores vulnerables anunciado a las personas con un alta voz, que deben tener cuidado y salir a tiempo, antes de que hayan inundaciones, un llamado al que nadie hace caso.
«Vinimos de nuevo a tratar que las personas salgan voluntariamente para que lleguen a los refugios», señaló.
Hasta las 11:00 de la mañana había 191 refugiados en la provincia María Trinidad Sánchez, nueve desplazados de manera voluntaria.
Garantizó a esas personas que sus pertenencias estarán garantizadas con seguridad, y expresó que lo que se busca es preservar las vidas de la gente.