German Marte 
Santo Domingo.-Pasó 15 años, cinco meses y 15 días prisionero en Estados Unidos por algo de lo cual, lejos de arrepentirse, se siente orgulloso, pues está convencido de que era una causa justa, por el bien de su país, incluso por la seguridad del propio Estado que lo mantuvo en prisión tanto tiempo. Su nombre: Fernando González Llort.
Él es uno del grupo conocido internacionalmente como “Los Cinco”, aquellos agentes cubanos que fueron apresados en septiembre de 1998, cuando daban seguimiento en territorio norteamericano a compatriotas sospechosos de tramar acciones terroristas contra la mayor de las Antillas.
Los compañeros de Fernando eran Antonio Guerrero Rodríguez, Gerardo Hernández Nordelo, Ramón Labañino Salazar y René González Sehwerert. Todos fueron acusados de ser agentes extranjeros sin notificar a las autoridades norteamericanas, “espías” le llamaban peyorativamente algunos.
De “villanos” a héroes
En Cuba, sin embargo, se les reconoce como héroes.
Corrían los últimos años del siglo pasado y aún quedaban en el ambiente las reminiscencias de la mal llamada “Guerra Fría”, con un agravante: eran cubanos, haciendo labores de inteligencia nada menos que la Florida, por lo cual los jueces fueron inclementes.
De nada valieron los argumentos de la defensa, ni la campaña internacional a favor de su libertad.
Parte de un proceso
Al hablar de aquella experiencia, González Llort, que fue liberado tras cumplir su condena hace dos años, asegura que no se arrepiente de nada.
“Yo no me siento arrepentido, al contrario, creo que una de las cosas que me permitió cumplir mi tiempo en la prisión sin sufrir ningún daño (psicológico) era saber que estaba haciendo algo positivo, algo bueno.
Una contribución a mi pueblo, al pueblo de EEUU y a la humanidad”, expresa convencido.
Durante nuestra conversación de casi una hora, me quedó claro que en su corazón no hay ni una pizca de rencor contra Estados Unidos por haberlo encerrado durante más de 15 años, dos de ellos en solitaria, alejado de su patria, de sus amigos, de su madre y de su esposa.
“A mí me ayudó mucho el comprender mi situación no como una cuestión personal, sino como un proceso histórico, de la relación de hostilidad de Estados Unidos hacia Cuba”, dice con firmeza y a la vez con cierta humildad.
Tras las rejas pensaba: “A mí me puede pasar lo que sea, me pueden matar, lo importante es la tranquilidad de la gente en Cuba, de los mismos norteamericanos, porque cuando pones una bomba en un hotel de La Habana, la bomba no distingue nacionalidades, y sucedió, y asesinaron a un italiano, eso le pudo haber pasado a un norteamericano”.
Agradece solidaridad
González, quien visita República Dominicana por primera vez, agradeció la solidaridad de los dominicanos y su integración a la campaña internacional por su liberación.
“Aquí en RD como en otras partes del mundo se hicieron muchas actividades en solidaridad con “Los Cinco”, incluso el Senado aprobó una resolución solicitando nuestra libertad”, dijo.
Nueva relación Cuba-EEUU
González Llort ve como muy positivo, aunque insuficiente, el giro que ha dado la relación entre Cuba y Estados Unidos.
“ Cuba nunca se había negado a una relación de buena vecindad con EEUU, en la historia está las múltiples veces que hubo conversaciones entre las partes y la disposición de Cuba de tratar de tener una convivencia armoniosa”, explica mientras recalca que habla “como un ciudadano más”.
Era EEUU que se proponía doblegar a los cubanos y hacerlos cambiar de sus ideas, su concepción sobre la sociedad en base a hacer que los cubanos pasaran por dificultades extremas, tal como lo demuestran los documentos desclasificados, indicó.
«Lo que hemos pasado los cubanos ha sido duro, y no es fácil estar a 90 millas del país más poderoso del mundo y tener casi permanentemente la amenaza de que te puedan hacer una acción militar o que te puedan realizar agresiones psicológicas, biológicas, de todo tipo, como se registra en la historia”, expresó.
El bloqueo no ha terminado
Advierte que a pesar de los avances en la normalización de la relación entre los dos países, el bloqueo se mantiene.
Una cosa es el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre los dos países y otra distinta es la normalización de las relaciones, aclara.
“No se puede considerar normal unas relaciones mientras el país más poderoso del mundo mantiene un bloqueo económico, comercial y financiero contra nuestro país, que trata de asfixiarnos económicamente”, afirma, y cita temas pendientes como la prohibición del uso del dólar y la base de Guantánamo, entre otros.
VIII Encuentro de Solidaridad con Cuba
Fernando González está en el país a propósito de la realización, el 28, 29 y 30 de este mes, del VIII Encuentro Continental de Solidaridad con Cuba, en su calidad de vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.
En el evento, que es coauspiciado por las campañas de Solidaridad con Cuba en RD y Puerto Rico, estarán presentes más de 220 delegados de 24 países del continente.
La actividad se desarrollará en la Universidad Autónoma de Santo Domingo y en la misma participarán personalidades como el teólogo brasileño Frei Betto.
