El gasoducto El Encino-La Laguna en el norte de México es, con US$630 millones, el 20 por ciento de la inversión que planea Fermaca Enterprises en una red de 1,947 kilómetros (1.210 millas) para llevar gas natural desde los yacimientos no convencionales del sudoeste de Texas hasta las plantas de energía mexicanas.

Fermaca se impuso a competidoras más grandes como Sempra Energy y TransCanada Corp. para la construcción de los proyectos.
Dentro de unos años, la red de Fermaca estará en condiciones de importar 1.200 millones de pies cúbicos por día de los Estados Unidos, alrededor de 15 por ciento de las importaciones de gas que se estima hará el país, según Raúl Monteforte, el director general de desarrollo.

La compañía compite por reemplazar el combustóleo, la gasolina, por gas natural, que es más barato y limpio.
Fermaca pertenece a la firma suiza de capital privado Partners Group Holding.