Awilda Cuello 
SANTO DOMINGO.– Familiares de los seis policía involucrados en el asesinato de la pareja evangélica Elisa Muñoz y Joel Díaz en Villa Altagracia también reclaman que se haga justicia y que la «soga no se rompa por lo más débil».
Ana María Reyes, pariente del cabo Norkys Rodríguez Jiménez, quien era chofer de la patrulla la noche del hecho, pidió a las autoridades actuar con justicia y no dejarse presionar.
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«Nosotros como familia de los imputados sentimos esta pérdida, aquí hay un grupo de hombres y mujeres que no solamente estamos defendiendo a los imputados, sino a toda una dotación policial que ha mantenido trabajando arduamente para que en nuestro pueblo Villa Altagracia podamos caminar en las calles», expresó la mujer, quien fungió como vocera del grupo de parientes de los acusados que acudió al Palacio de Justicia, donde se conoce la medida de coerción.
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Los familiares de los acusados reconocieron que hubo un exceso por parte de los policía, «pero hoy estamos aquí exigiendo un juicio justo para que ambas partes queden conforme».
Los agentes policiales involucrados son el segundo teniente Victorino Reyes Navarro, el sargento Domingo Perdomo Reyes, los cabos Norkys Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, así como también los rasos Anthony Castro Pérez y Juan Manuel Ogando Solis.
Elizabeth Muñoz Marte y Joel Díaz fueron asesinados cuando regresaban a su hogar después de un culto evangélico en Villa Altagracia. Los policías le dispararon al vehículo en que viajaba la joven pareja al «confundirlo» con el de unos delincuentes a quienes le daban seguimiento.
