Extravíos

La “pencada” de salir hacia Bonao y llegar a Boca Chica quedará en la historia electoral dominicana como la frase que mejor describió a una propia candidatura.

La embriaguez del poder siempre ocasiona similares extravíos. Me recuerda que en agosto pasado vi un águila marina, en el Caribe hispano llamada güinche o güincho, al parecer desconcertada, volando a baja altura sobre la Plaza de la Bandera mientras un feroz petigre, pequeño pero rabiosamente territorial, lo incordiaba dándole picotazos.

El David emplumado ganó el pleito. La naturaleza ofrece tantos símiles o metáforas de realidades humanas que a veces se dificulta ignorar esas gratuitas y simbólicas lecciones. El mundo de los pájaros con plumas ofrece muchísimas rarezas, como pichones que en su pico poseen un diente para salir del cascarón picándolo.

Eso nunca lo he visto, pero a veces me conviene llevarme de expertos o maestros experimentados. Siempre que toco la ornitología me dicen que hablo sobre política… aunque confieso que el pico dentado me recordó a Omar Fernández, joven prodigio entre los aspirantes presidenciales.

Cualquier petigre pone a cuyayas o guaraguaos a embalarse, más si entre ellos arman tal reperpero que terminan todos equivocados o tan perdidos como el güincho y el Penco. Ahorita me dirán cotorro por repetir el verso con música distinta…