Fausto Polanco
Tener un niño inscrito en un colegio es para ricos, pero tener más de uno es para millonarios. Resulta que la lista de útiles escolares es kilométrica y uno no entiende para qué tantos libros. Es increíble cómo a un niño de primero, segundo y tercero de básica le hacen llevar tantos útiles.
Es tan grande esa lista que después que el niño la tiene no puede llevarlos, porque su tamaño y poca fortaleza física le impide llevar todo esto. He visto niños cargando mochilas repletas de libros y otros casi doblados porque no pueden por el peso.
Esto podría ocasionarle al infante un problema de salud, específicamente con la columna vertebral, debido a que con tanto peso esta importante parte del menor puede afectarse.
También piden una gran cantidad de papel higiénico a cada niño. Qué hacen con tanto papel. Y para colmo, cobran los meses de junio y agosto completos, cada uno con menos de 15 días de clases. El mes de julio no te lo cobran, pero lo compensan con la inscripción que es más cara que la propia mensualidad.
¡Cuánto dinero hay que buscar para la educación! Hoy es mejor llevar a sus hijos a una escuela pública, a la tanda extendida, que ha implantado este gobierno, porque si las cosas siguen como van una persona de clase media no podrá tener más de un niño en un colegio.
En épocas anteriores los niños de una familia estudiaban con los libros que dejaban los mayores, pero en la actualidad esto no es posible, porque los útiles son parte del día a día, pues los estudiantes escriben sobre estos, porque así los han hecho, para que sea necesario cambiarlos año por año. Qué barbaridad.
Basta ya de tantos abusos. Hay que ponerle fin a este tipo de medidas de los colegios privados. Lo malo de todo esto es que solo se habla del asunto cuando ya todo el mundo ha adquirido los útiles escolares.
