Los dos continentes que han acaparado la totalidad de 22 Copas Mundiales de Fútbol efectuadas celebran de manera concomitante su respectivo torneo absoluto de selecciones: la Eurocopa en Alemania y la Copa América en Estados Unidos, ambas por disputar sus semifinales.
Pocas anotaciones (excepto algunas goleadas), poco fútbol, juego muy físico rayando con la peligrosidad y mucha pérdida de tiempo, arbitraje permisivo o mediocre y selecciones decepcionantes caracterizan la Copa de Europa como la americana de 2024.
Con mayor equilibrio, en la Eurocopa se disputaron 48 partidos en sus primeras etapas y en muchos la carencia de goles fue notoria: seis juegos concluyeron sin anotación, diez 1-1, siete 1-0, nueve 2-1 y cinco por 2-0.
En el torneo del joven continente, cumplida la fase de grupos y cuartos de final se disputaron 28 encuentros y en mayoría la relación de goles fue muy baja: 5 terminaron 0-0, igual cantidad por 1-0; tres 1-1, tres 2-0 y otros seis limitados a tres tantos.
Muchos de estos goles crearon incertidumbre y mucha pérdida de tiempo de juego, porque los árbitros acudieron al VAR a verificar si hubo posición correcta. De hecho, varios fueron anulados por fuera de juego milimétricos, llevando la rigurosidad a extremos y poniendo en vilo a todos.
El arbitraje ha sido tema por favorecer a poderosos o fallos propios. En el Alemania-España de cuartos, a los tres minutos Toni Kross hizo fuerte entrada a las rodillas de Pedri, que saltó por los aires, lo cual ameritaba un castigo de tarjeta roja directa, pero el árbitro Tony Taylor ni amarilla mostró. Por la lesión provocada, el barcelonista se perderá de cuatro a seis semanas. Kross también dio un pisotón al niño de 16 años Lamine Yamal, pero tampoco Taylor le mostró tarjeta. Con esa mancha culminó el teutón su casi impecable carrera de jugador, caracterizando así la violencia que ha primado en la Eurocopa.
Por el lado de América, resultó pavorosa la entrada al brasileño Rodrygo, por el uruguayo Nahitan Nández. El árbitro cobró amarilla y tras revisar en VAR la cambió por roja y expulsión: hizo justicia. Lo visto en la repetición da grima y cabría preguntarse si el brasileño del Real Madrid tiene “piernas de goma”, pues Nández le dobló el tobillo, pero no se reportó lesión.
El cuatro veces campeón mundial y campeón defensor de la Eurocopa, Italia, fue la primera gran decepción al despedirse en octavos, con un fútbol poco digno de su estirpe. Igual puede decirse de Inglaterra y Francia, aunque alcanzaron las semifinales. Mejor estuvieron Portugal de Cristiano Ronaldo (que se topó con la Francia de un apagado Mbappé en octavos) y Alemania, al que despidió el mejor de la Eurocopa hasta el momento, España, que le tocó Francia en semifinales.
En Copa América, Brasil comenzó cojeando con un empate con Costa Rica y avanzó a la segunda fase como segundo, para despedirse en cuartos en penales con Uruguay, el mejor junto a Colombia y el campeón Mundial Argentina, con un Leo Messi a un cuarto de gas.
México volvió a mostrarle a su gente y al mundo que es una selección de segundo tramo en América y del tercero o cuarto nivel global, aunque se marchó a casa tras el partido más eléctrico de la Copa estadounidense, contra un gran Ecuador, al que tumbó Argentina en los penales.
A falta de disputarse las semifinales este martes y miércoles, la Eurocopa como la Copa América han mostrado poco gol, juego brusco con lesiones y pérdida de tiempo como efectos y pobre arbitraje: el buen fútbol ha estado de vacaciones.