Santo Domingo.-Chayanne lo logró nuevamente y llenó hasta la última fila de asientos del Palacio de los Deportes, en donde se notó a un público eufórico y enloquecido con la figura y canciones del artista boricua que tenía varios años sin presentarse en el país.
Sin embargo, la falta de acústica deslució el concierto para quienes fueron a disfrutar y escuchar sus canciones, pues la verdad es que no se entendió nada de lo que Chayanne cantó, pero mucho menos de lo que habló.
A pesar de tener un excelente equipo de sonido que trajo para este concierto el artista, la música se escuchaba totalmente desordenada y donde mejor se escuchaba era en el centro.
Cuando uno trataba de acomodarse mejor y se movía a una de las esquinas, el sonido empeoraba, convirtiéndose en ruido.
Para colmo de males, el público no quiso sentarse y parado en los asientos no permitía que los que estaban detrás pudieran ver al artista y sus acompañantes.
A quien escribe le tocó estar en la última fila del centro, con muy pocas oportunidades de ver el show y mucho menos escucharlo.
Sin embargo, estas molestias al parecer no fueron motivos para que el público dejara de disfrutar la noche, pues las mismas pasaron desapercibidas entre la gran multitud que solo quería ver al artista y cantar con él.
Definitivamente que las canciones que más llegaron al público fueron “Humanos a Marte”, “Madre tierra (Oye)”, “Torero” y “Salomé”, ya que con estas la gente se puso de pies y a ritmo de las canciones empezó a corearlas y bailarlas.
Temas como “Tu respiración”, “Va creciendo el amor”, “Un siglo sin ti”, “Atado a este amor”, “Cuidarte el alma”, “Tiempo de vals”, “Lo dejaría todo”, “Y tú te vas”, “Provócame” y otras, formaron parte del repertorio de éxitos que interpretó Chayanne.
El artista saludó al público y aunque era poco lo que se entendió de lo que dijo, la gente lo recibió con aplausos y algarabía.
“Gracias a la prensa por esperarme en el aeropuerto, a ustedes en Santo Domingo por recibirme en este escenario y a mi equipo por soportarme tantos años”, expresó.
Fue un concierto fugaz para sus miles de seguidores, de menos de dos horas, pues inició pocos minutos antes de las 9:00 de la noche y a las 10:35, luego de interpretar a “Provócame”, el artista se marchó.
La gente no quería irse del lugar esperando más canciones del artista, pero este no regresó y el público decidió irse tranquilo.