El gobierno del presidente Barack Obama anunció ayer que eliminará gradualmente la utilización de algunas cárceles privadas, una decisión que afectará a miles de reclusos federales y que hizo que bajaran de inmediato las acciones de dos empresas del sector.
Las cárceles particulares en el patíbulo son administradas por tres compañías privadas: Corrections Corporation of America, GEO Group Inc., y Management and Training Corporation.
En un memorando dirigido a la Oficina de Prisiones, la subsecretaria de Justicia, Sally Yates, autorizó reducir la contratación de prisiones privadas.