Es importante tener un plan de salud personalizado y el seguimiento médico constante.
Santo Domingo.-La hipertensión arterial, comúnmente conocida como presión arterial alta, es una condición médica crónica caracterizada por un aumento persistente de la presión sanguínea en las arterias.
Este trastorno es uno de los principales factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares, incluyendo infartos de miocardio, accidentes cerebrovasculares y insuficiencia renal.
A menudo denominada ‘el asesino silencioso’ debido a su naturaleza asintomática en etapas tempranas, la hipertensión afecta a una proporción significativa de la población mundial y representa un desafío crítico para los sistemas de salud pública.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), si no se trata, puede provocar graves problemas de salud como derrames cerebrales, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca y daño renal.
Sin embargo, simples cambios en el estilo de vida pueden tener un impacto significativo en la reducción de la presión arterial, como explica el doctor Luke Laffin, cardiólogo preventivo de la Cleveland Clinic.
Sal y potasio
La sal es un factor importante en el control de la presión arterial. Reducir la ingesta de sodio puede tener efectos similares a tomar medicamentos para la hipertensión. La Asociación Americana del Corazón (AHA) recomienda no más de 1,500 mg de sal por día, aunque un límite de 2,300 mg también es beneficioso. La adaptación a una dieta baja en sodio puede llevar de 10 a 14 días.
El especialista recuerda que el potasio ayuda a los riñones a eliminar el exceso de sodio. Alimentos ricos en potasio incluyen plátanos, tomates, aguacates y espinacas. Sin embargo, este consejo no se aplica a pacientes con enfermedad renal.
Combinación
La dieta DASH, rica en frutas, verduras y granos enteros, es efectiva para reducir la presión arterial. También ayuda a cumplir con las pautas de bajo sodio y alto potasio y puede facilitar la pérdida de peso.
Además, la actividad física, especialmente aeróbica, es crucial para mantener los vasos sanguíneos flexibles y aumentar el flujo sanguíneo. Los ejercicios de resistencia dinámica e isometría también son beneficiosos.
Peso saludable
La pérdida de peso, incluso mínima, puede tener un impacto significativo en la presión arterial.
Las células grasas alrededor del abdomen son metabólicamente activas y pueden aumentar la presión arterial.
La prevención es clave
Llamado. La Asociación Dominicana de Administradoras de Riesgos de Salud (ADARS) también hace un llamado a la población para cuidar la salud del corazón, destacando que el 30.8 % de los adultos en República Dominicana sufren de hipertensión.
ADARS recomienda seguir una serie de hábitos saludables para controlar la hipertensión, incluyendo una dieta rica en frutas y verduras, evitar las grasas, mantener una rutina de ejercicio, evitar el estrés y seguir al pie de la letra la medicación prescrita.
También enfatiza la importancia de un plan de salud personalizado y el seguimiento médico constante.
Destaca que la gestión de la presión arterial combina cambios en el estilo de vida y medicación cuando sea necesario. La adopción de hábitos saludables no sólo reduce la presión arterial, sino que también mejora la salud general y previene complicaciones graves.
