En una conversación es importante que no solamente hablemos, también que escuchemos activamente, sin diluirnos en otros temas, recordando siempre el objetivo de la conversación.

Cuando esto sucede, perdemos el sentido de la conversación, lo que trae confusión en el interlocutor y este entienda que no se le está respetando, considerando o que su planteamiento no es importante.

Cuando la conversación es con la pareja, es todavía más delicado ya que están en contacto permanente y hay que mantener la armonía y el interés para el mejor funcionamiento de la relación.

Comparto en los siguientes párrafos, algunas de las estrategias a utilizar.
En conversación con tu pareja nunca des nada por sentado, además de escuchar con atención e interés, hay que permitir que la pareja se exprese abiertamente sin interrupción, sin saltar a conclusiones antes de tiempo o a juicios o críticas.

Es importante procurar una postura abierta, que no se note defensiva, relajada, sin brazos o piernas cruzadas, sentándose al mismo nivel y evitando gestos de distracción ( jugar con las llaves o con algún objeto que tenga en las manos o cercano, revisar el teléfono, desviar la mirada a otros lugares que no sea la cara del interlocutor).

Estar pendiente del tono de voz, los gestos y la posición al hablar. Evitar silencios prolongados, no contestar una pregunta o no pedir información ni clarificación de ser necesario.

Para recordar: apagar teléfonos, mantener contacto visual, escuchar pacientemente, incluir expresiones afectivas, utilizar el presente no el pasado, controlar los impulsos y tener presente la tolerancia.