La emigración española hacia la República Dominicana ha sido constante desde el siglo XV. Pertenecemos como sociedad a los pueblos del mundo que tienen culturalmente un fuerte influjo de la cultura española, desde su lengua hasta gran parte de su dieta. Sin negar la fuerza de la herencia africana y aspectos heredados de los tainos.
Durante el siglo XX miles y miles de españoles llegaron a nuestra tierra a trabajar y aportar su formación profesional y artística. Soy fruto de la emigración de 1955 de labriegos españoles.
El desarrollo de la sociedad dominicana presente es incomprensible sin el aporte de tantos gallegos, asturianos, vascos, catalanes, castellanos, canarios, y para que mi amigo Laureano no me critique, también baleares.
No sólo son españoles los que nacieron en la península. Sus descendientes compartimos la nacionalidad y el amor por España, sin menoscabo por la identidad dominicana.
Uno de los organismos que existen en todo el mundo donde hay emigración española es el llamado Consejo de Residentes Españoles (CRE).
Instancia formada por voluntarios, electos por los ciudadanos españoles de cada país, para servir a las necesidades de los ciudadanos españoles radicados en cada sociedad, en nuestro caso la República Dominicana.
Este domingo 19 de marzo en la embajada española estarán abiertas las urnas para votar por el próximo Consejo de Residentes Españoles.
Mi voto va por la plancha Españoles en el Mundo cuya cabeza de lista es Eduardo Pahino. Con el voto de cada ciudadano español en el país se consolida el progreso de nuestra comunidad.