Eso, ¿dónde se van a meter?

Eso, ¿dónde se van a meter?

Eso, ¿dónde se van a meter?

Preguntó Nicolás Maduro :“¿Irme para donde?”. Lo mismo se pregunta todo el mundo, y particularmente quienes buscan una solución a la situación venezolana: ¿dónde meterlo? ¿A dónde enviarlo?

Este es el gran dilema, buscarle una “salida” a Maduro. Darle seguridad. En pocas palabras, garantizarle que no será juzgado por todo lo que le ha hecho a Venezuela y a los venezolanos.

Y no solo se trata de Maduro, seguramente también habrá que darles “seguridades” a Diosdado Cabello y a unos cuantos más, incluyendo no pocos generales. Si se revisa el mapa no hay muchos rincones “dónde”

Normalmente los izquierdistas latinoamericanos no eligen exiliarse en Cuba, ni hoy el régimen castrista está en condiciones de dar cobijo a tanta gente. Rusia, China, Turquía e Irán son aliados, pero en otro plano y estrategia.
Los exilios más cotizados, según los antecedentes, son Europa, particularmente los países que han reconocido a Guaidó, y los EU al que no le hacen asco cuando tienen el chance de irse para allá.

Pero en estos momentos parece difícil que en esos destinos haya lugares disponibles para Maduro y sus secuaces.

En consecuencia, solo quedan algunos países amigos y aliados de las Américas. Y en ese plano el escenario es bien curioso, porque para cualquiera de los países “amigos” sería un problema interno recibir este contingente de “millonarios” venezolanos con cuentas bloqueadas.

Empecemos por Mexico, ¿se animará AMLO? Una cosa es jugar a dos puntas y “posar” y otra es que se le venga a vivir tanta gente entre la cual hay muchos narcotraficantes. ¿Y para qué otros más?

Uruguay, el otro “mediador”, es muy pequeño para tanto chavista. El estalinista Partido Comunista uruguayo, que “maneja” al Frente Amplio, coalición de izquierda que gobierno al país, estaría dispuesto, pero no alcanza.

Es difícil que el presidente Tabaré Vázquez y el ex José “Pepe” Mujica que han apadrinado a Maduro arriesguen tanto.

En estos días la imagen de Vázquez ha quedado algo maltrecha por algunos presuntos “negocios” familiares con Venezuela y en igual sentido pasa con sectores del MPP (grupo de Mujica), también “vinculados” a Venezuela. Pero no es solo eso, a fines de este año hay elecciones y el FA no las tiene todas consigo y el apoyo a la dictadura de Maduro le está afectando.

Al FA como a Maduro le convendría ganar tiempo y que prospere “la mediación”.
¿Nicaragua? La dupla dictatorial Ortega –Murillo sigue empeñada en reprimir a los nicaragüenses y no parece que quiera hacer mucho más olas.

Lo que está pasando en Venezuela ha beneficiado al matrimonio, por cuanto ha desviado la atención del mundo, el que de todas formas no debería descuidarse, dado que lo de Nicaragua es tan grave como lo de la dictadura chavista. Lo mismo le pasa a Evo Morales en Bolivia. Está quietito.