El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan (i), y su homólogo ruso, Vladímir Putin (d), ofrecen una rueda de prensa tras una reunión de alto nivel celebrada este lunes en el Kremlin, en Moscú (Rusia).
Moscú.- El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró hoy que la compra de los sistemas de misiles S-400 a Rusia “está hecha” y corresponde a una decisión soberana que nadie podrá frenar, en referencia a las presiones de EEUU para que abandone el acuerdo.
“Nadie va a socavar nuestra soberanía. Cuando otros países dan algunos pasos, no nos preguntan tampoco, de manera que nosotros tomamos nuestras propias decisiones, tanto en el área de la defensa como en el de la energía”, recalcó Erdogan en una rueda de prensa conjunta con su homólogo ruso, Vladímir Putin.
“Cada país debe hacer lo que tiene que hacer. Pensamos en nuestros propios intereses y ya tenemos una hoja de ruta para los S-400. Es un trato hecho y si alguien quiere (…) frenarnos, le digo que ya hemos firmado el acuerdo. Lo aplicaremos y honraremos nuestro trato. Es nuestra decisión soberana y nadie nos puede parar”, dijo.
El Gobierno estadounidense ha presionado a Erdogan para revertir la decisión, porque rechaza que un miembro de la OTAN adquiera un sistema armamentístico a Rusia, pero el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, ha reconocido que cada país tiene derecho a tomar estas decisiones. El 3 de abril de 2018, Putin anunció que Rusia había acelerado la producción de sistemas S-400 para Turquía a solicitud de Ankara, y las partes acordaron un precio, que asciende a 2.500 millones de dólares, según estimaciones de la prensa turca.
El pasado día 5, Erdogan confirmó que Ankara espera las entregas de los S-400 en julio, según informó la agencia de noticias Anadolu. El S-400 es un sistema de defensa antiaérea capaz de derribar objetivos aéreos a una distancia de 250 kilómetros y de misiles balísticos no estratégicos a 60 kilómetros.
