Johnny Olivo es el ejemplo recurrente al que apelan periodistas y conocedores de la época de ensueño del béisbol de aficionados que tuvo como epicentro de década de 1970, ante el enfado por su no exaltación al Pabellón de la Fama del Deporte dominicano.
Miguel Beato Cruz y Francia Jackson de voleibol, Héctor Báez en baloncesto, entre otros, son emparentados con Olivo como símbolos tomados entre quienes se sienten defraudados y se preguntan son los argumentos para que no hayan escalado el solio simbólico de la inmortalidad deportiva cumbre de nuestro país.
Nacido en Gurabo (Santiago) en 1953, destacó en el Montecarlo y la Católica Madre y Maestra en el segundo lustro de los 70s en la pelota amateur de Santiago, y desde 1979 con el Central Río Haina del torneo distrital, y más de 10 veces integró la selección nacional. Falleció en 2019.
Entre sus hazañas se cuentan la blanqueada a juego completo que propinó a la escuadra de Estados Unidos para que República Dominicana conquistara la medalla de plata en los Juegos Panamericanos de 1979 en San Juan (Puerto Rico), partido que finalizó 1-0 y decidido con un cuadrangular de Enrique –Quique- Cruz.
Olivo le ganó en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe Universitarios a Cuba, que en ese nivel asumía igual jerarquía que la casi invencible escuadra nacional absoluta de la mayor de las Antillas.
En la entrega anterior relatamos una conversación con Juan –Piñao- Ortiz, en la que pedimos que, ante un hipotético partido decisivo, a quién escogía entre Wilfredo Fernández y José Joaquín Tineo y concluyó con que daría 4 ½ entradas a cada uno.
Al continuar aseguró que Olivo está al mismo nivel que los dos estelares diestros. “Johnny Olivo tenía la mejor curva y aunque su recta no era la de Joaquín Tineo ni Wilfrido, cuando la lanzaba los bateadores la veían como a 90 millas”, ponderó Ortiz.
Así como habló de Pablo Alcántara, Sosúa Rodríguez y Avelino Toribio antes de citar al astro zurdo, Ortiz explicó su visión sobre lo que vio de otros que definió como “verdaderos lanzadores de la década de 1970 e inicios de los 80” y aunque fueron contrarios en los equipos locales “siempre les mantuvimos bastante admiración y respeto por su calidad, principalmente competitiva”.
Los últimos ponderados fueron Julio César Domínguez (Marichal), el zurdo Rafael “Faíto” Ramos, Federico “Fellé” Asencio y Gabriel «Gaby» Salazar, pero sus consideraciones acerca de ellos serán expuestas en otra entrega.
A fin de colocar el punto y final de los tres que ‘Piñao’ Ortiz considera de igual nivel, soltamos el último fogonazo para ver si el bravío exreceptor se la jugaba una vez más. ¿A quién seleccionaría para un partido por el oro entre Wilfredo Fernández, José Joaquín Tineo y Johnny Olivo?
“Abriría con Joaquín Tineo, seguiría con Johnny Olivo, para variar la velocidad, y terminaría con Wilfredo Fernández. Y si necesitara otro para rematar, me voy con ‘Sosúa’ Rodríguez”, fue su respuesta.