SANTO DOMINGO.. Varias entidades de la sociedad civil han empezado a promover el voto consciente y la participación activa en el proceso electoral convocado para el próximo día 19.
El presidente del Consejo Dominicano de la Unidad Evangélica, Feliciano Lacen, dijo ayer que es de vital importancia que todo dominicano mayor de edad y habilitado para votar acuda a las urnas.
“Ese es un compromiso constitucional y es importante que los ciudadanos sepan elegir bien. Que la persona que goce de su voto sea responsable, amante a la patria y a la familia y dar muestras de compromiso con la colectividad”.
Afirmó que si no se ejerce el derecho a votar, se pierde moralmente la posibilidad de reclamar y de exigirle a las autoridades porque no se fue parte de las elecciones. Salgan a votar temprano.
El voto es secreto y personal. Elijan a los mejores candidatos y reitero, todo aquel que no lo hace, pierde derecho a reclamo”, concluyó.
Otros de los que se expresaron al respecto fue el joven Miguel Martínez, coordinador del movimiento Guardianes de la Democracia, un remanente de las protestas escenificadas en la Plaza de la Bandera en las elecciones del 2020.
“Tiene que ver las propuestas de todas las candidaturas de su territorio, aprender sobre la relevancia que tiene el Senado de La República así como la Cámara de Diputados, que toman decisiones a diario que terminan por incidir en la vida de todos los dominicanos”, dijo.
Participando como invitado al espacio Esto no Tiene Nombre, adujo que el tener buenos senadores incide en la elección de una Junta Central Electoral imparcial, en la escogencia del Poder Judicial y en el contrapeso que necesita todo gobierno.
Recomendó separar las boletas antes de ejercer el sufragio para evitar que la tinta traspase la siguiente y que el voto no sea anulado. “También recomiendo dividir el voto porque a un presidente le conviene tener buenos legisladores de oposición porque hasta lo cuidan al llamar la atención. El poder absoluto daña”, indicó.
Los resultados que favorecen un partido
Casos. El Congreso Nacional ha tenido en su historia reciente varios periodos en los que una organización política presenta hegemonía numérica en ambas cámaras.
Las proyecciones de las encuestas indican que tal cosa podría repetirse, tras aparecer los candidatos del Partido Revolucionario Moderno como cimeros en los distintos estudios de opinión.
En el año 2002, el Partido Revolucionario Dominicano llegó a controlar casi en su totalidad el Senado con 29 legisladores. A partir del 2006 hubo un cambio de rumbo con el PLD logrando 28 senadores y pasando a 29 en el 2016. En el pasado proceso electoral y pese al rotundo éxito del PRM, el equilibrio de poder fue más notorio.