Berlín.- Un enfermero alemán, Nils Högel, ya condenado por haber matado a dos pacientes, es ahora sospechoso de al menos 90 asesinatos en Alemania entre 2000 y 2005, anunciaron ayer los investigadores.
Después de “134 exhumaciones, y varios cientos de testimonios, podemos probar al menos 90 asesinatos y hay otros tantos que no podemos probar”, declaró ante la prensa el jefe de la investigación, Arne Schmidt.
“Este número de muertos es excepcional, único, en la historia de la República Federal” de Alemania, añadió, anunciando que la comisión de investigación especial “Kardio” a cargo del caso había ahora acabado su trabajo.
“La comisión de investigación especial estableció 84 asesinatos, en el estado actual de la investigación”, indicó a la prensa el jefe de la policía de Oldenburgo (norte), Johann Kühme.
En junio de 2016 los investigadores del caso establecieron la implicación del enfermero en 33 muertes, pacientes en varios centros donde trabajaba Högel, quien habría matado a la mayoría de sus pacientes administrándoles sobredosis de medicamentos cuando estaban en reanimación.
Intento de asesinato
El caso salió a la luz en 2005, cuando un compañero sorprendió a Nils Högel aplicando una inyección no autorizada a un paciente en la clínica Delmenhorst. Eso le valió en 2008 su primera condena por intento de asesinato.