Santo Domingo.– La ampliación de la primera línea del Metro de Santo Domingo beneficiará a miles de residentes del municipio de Santo Domingo Norte, quienes claman a las autoridades acelerar los trabajos para hacer uso del medio de transporte con mayor comodidad.
Para comunitarios de la zona, la lentitud de la extensión está provocando pérdidas a los comerciantes y afectando la salud de niños y envejecientes que residen en lugares que colindan con los espacios donde se lleva a cabo la construcción.
Así lo afirmó Juan García, que tiene una tienda de venta de calzados en la avenida Hermanas Mirabal, la cual no puede operar con regularidad por el cierre de la vía, donde se está trabajando en las columnas que sostendrán el viaducto elevado.
La extensión va desde la estación Mamá Tingó hacia Punta de Villa Mella.