Santo Domingo.-Glenys Féliz Disla, una humilde madre soltera del empobrecido barrio La Esperanza, en Los Alcarrizos, dice que con esfuerzo logra el sustento de sus tres niños.
Como ella, abundan muchas otras.
Sin embargo, aunque vive al lado de la súper poblada y deteriorada escuela Norge Botello, prefiere pagar 1,200 pesos para que dos de sus niños, de 3 y 7 años, se eduquen en otro centro.
“Es que ahí (en ese plantel) están muy agrupados; en un curso hay 64 muchachos y temo que se enfermen”, comentó.
En el entorno cercano al hospital Calventi, las quejas de las madres de estudiantes afloran por todas partes, como también proliferan pequeños maternales y guarderías particulares que, a pesar de que el costo ronda los RD$ 500, rerepresentan una carga para las familias.
Obras paralizadas
Mientras eso ocurre, las escuelas de Básica Martha y la Espejo Evaristo Brito Reyes, iniciadas en 2014 por la Oficina Supervisora de Obras del Estado (Oisoe), están prácticamente paralizadas por falta del pago de cubicaciones para que los ingenieros a cargo terminen detalles como puertas, pintura, pisos y retiro de escombros e instalaciones deportivas.
Panorama y quejas
“Es una situación extremadamente mala, no se sabe cuántos muchachos hay inscritos ahí… cuando llueve se moja todo, los baños están vueltos en desastre, los muchachos se tienen que sentar en el piso y hasta se pelean a diario por las incomodidades”, describió Julisa Vásquez Belén, residente en la calle Orlando Martínez equina Anacaona.
Ella se refiere a la escuela Norge Botello, donde al igual que Glenys tiene a sus tres hijos. Afirmó que el centro en cuestión demanda de maestros y esperan con ansias la conclusión de los centros de enseñanzas que construye el Gobierno.
“Yo tengo dos nietos de 6 y 7 años en segundo y primero allí y lo que queremos es que nos pongan en otra escuela mejor”, exclamó Teresa Valenzuela, de la calle Emilio Prud’Homme.
Doble condición
El referido centro vespertino de dos niveles y apenas 8 aulas, dirigido por Ángela Cabrera, a quien EL DIA no logró contactar, opera en horas de la mañana bajo el nombre de Centro Educativo Carol H e imparte clases desde inicial a sexto grado.
La propietaria del local, quien dirige este último, Yudy Herrea, afirma que operan allí desde 1992.
Asegura que en esta tanda acogen 58 alumnos y sus padres pagan RD$800 mensuales.
En la versión pública, el Ministerio de Educación les paga alrededor de RD$18 mil de mensualidad y se imparten clases desde inicial a octavo grado.
Otro de los detalles observados y que no fue comentado por las madres de los alumnos es que al lugar llega agua dos veces a la semana y los estudiantes tienen que descargar los baños con latas o cubetas, las puertas de estos están en franco deterioro en hojas de acero corroído que representan un peligro ante el amontonamiento y movilidad de los niños.
Detalles nuevas escuelas
La escuela Básica Martha, en la calle Manuel de Jesús Galván, contará con 27 aulas, área administrativa o dirección, salón multiusos, dos canchas, comedor y cocina y tres aulas para el nivel inicial.
De acuerdo con Alexis Ledesma, uno de los ingenieros residentes, la obra está a cargo de Jacobo Aquino a través de la Oisoe y han tenido que paralizar los trabajos en varias ocasiones por falta de pago.
La escuela Espejo Evaristo Brito Reyes, en el sector Los Calizos, cuenta con 24 aulas, salón multiusos, comedor cocina, aulas iniciales, áreas administrativa y deportiva y está a cargo de Diglenys Betances, de la Oisoe.
