Edilí Arias 
Stalin Alexander Polanco Abreu, fiscal de Azua.
Santo Domingo.- En la República Dominicana hay menos de 350 fiscales activos, una cifra alarmante que deja al sistema judicial con un déficit cercano a los 500 fiscales, informó Stalin Alexander Polanco Abreu, fiscal de Azua.
Explicó que estas carencias impactan gravemente el funcionamiento de los tribunales y las investigaciones a nivel nacional.
Renuncias masivas
Dijo que durante la gestión de Miriam Germán Brito como procuradora general de la República Dominicana, se ha registrado un incremento en las renuncias de fiscalizadores.
Polanco Abreu explicó que la huelga de fiscales, inicialmente prevista para el año pasado, se pospuso tras una reunión con la procuradora adjunta y directora de Persecución del Ministerio Público, Yeni Berenice Reynoso, y la propia Germán Brito.
En ese encuentro, se acordó mejorar las condiciones laborales, salariales y realizar los ascensos pendientes. Sin embargo, aseguró que aunque el presupuesto para estos compromisos está disponible, falta voluntad para ejecutarlos.
Procuradora adjunta, Yeni Berenice Reynoso.
“Hay procuradores asistiendo a audiencias prácticamente en pañales. Nos estamos muriendo en los tribunales”, denunció Polanco Abreu, quien añadió que, a nivel nacional, hacen falta cerca de 500 fiscales.
El fiscal señaló en el programa El Día que, en muchas ocasiones, los fiscales deben cubrir de sus propios bolsillos el combustible para los vehículos utilizados en las investigaciones, así como comprar chalecos de protección y equipos de higiene personal.
la procuradora general de la República, Miriam Germán Brito.
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“A veces salimos de una audiencia en un motoconcho; esa es la realidad de los tribunales. Queremos trabajar, pero necesitamos las herramientas para hacerlo”, expresó.
Reclamos salariales y presupuestarios
Uno de los principales reclamos de la Asociación de Fiscales Dominicanos (Fiscaldom) es la desigualdad salarial respecto a sus pares del Poder Judicial.
Polanco Abreu recordó que el presupuesto del Ministerio Público debería representar el 1.44 % del Producto Interno Bruto (PIB), pero solo reciben el 0.88 %.
Detalló que un fiscalizador percibe un salario de 90 mil pesos más 9 mil adicionales para combustible, mientras que un fiscal de primera instancia gana 125 mil pesos menos los descuentos. Subrayó que el último aumento salarial se realizó en 2021 y mencionó que en algunos casos un solo fiscalizador debe cubrir tres municipios.
Jornada de lucha
Polanco Abreu advirtió que este lunes continuará la jornada de lucha de los fiscales del país, con la paralización de labores desde las 8:00 a.m. hasta las 4:30 p.m.
En este periodo, los fiscales no subirán a las audiencias en todos los tribunales del país.
“Esta medida busca garantizar el debido proceso y respetar la libertad. La función del fiscal es crucial a la hora de conocer una audiencia”, explicó.
Desafíos en el sistema judicial
El fiscal destacó que los fiscales son “la oveja maltratada del sistema de justicia”, trabajando 24 horas al día y dirigiendo los procesos de investigación. Además, criticó que el Ministerio Público está “viejo y agotado”.
Según Polanco Abreu, los fiscales en las provincias del interior enfrentan graves deficiencias para abordar delitos complejos.
“Así como ha evolucionado la sociedad, el crimen también lo ha hecho. En los pueblos también hay casos de pornografía, lavado de activos y delitos de alta tecnología, pero las fiscalías especializadas solo están en el Distrito Nacional”.
Concluyó señalando que, en muchos casos, es necesario esperar que un procurador especializado viaje desde la capital para atender estos delitos en las provincias.
