TORONTO.— La película “Hustlers» (“Estafadoras de Wall Street») es, de por sí, una estafa. Parece una cinta sexy y glamorosa sobre strippers — todas brillantes, con poca ropa y entaconadas — y lo es. Pero detrás de esa superficie también hay una historia feminista sobre mujeres que toman el control en una industria dominada por los hombres.
“La gente entra al cine esperando una cosa porque `stripper’ es una palabra que tiene muchas connotaciones e ideas preconcebidas», dijo su guionista y directora, Lorene Scafaria.
“Esa es la estafa. Con suerte estamos subvirtiendo las expectativas, pero subvirtiéndolas de manera que tenga algunos matices».
“Hustlers», que se estrena en salas comerciales esta semana tras su bien recibido debut en el Festival Internacional de Cine de Toronto, sigue a Jennifer López como Ramona, una bailarina nudista veterana en Nueva York que acoge a una joven bailarina (Constance Wu) bajo su ala.
Ramona organiza una estafa a tipos de Wall Street involucrados con drogas a quienes exprime las tarjetas de crédito. La cinta se inspira en una historia de la vida real reportada por la revista New York en 2015, y transcurre tras la crisis financiera de 2008, cuando timadores mucho más grandes de cuello blanco disfrutaron de total impunidad.
El mundo transaccional de los clubes nudistas — comúnmente presentado en el cine desde el punto de vista masculino — rara vez ha sido visto desde la mirada femenina como en “Hustlers».
Es un microcosmos de Estados Unidos, según López. “Todo es un club nudista», dijo la estrella neoyorquina de origen puertorriqueño. “Tienes gente lanzando dinero y gente haciendo su baile».
“Esta película dice algo sobre la disparidad de la que hemos estado gritando desde hace tiempo y de la que hemos logrado avanzar un poco», agregó.
“Y odio decirlo de una manera tan generalizada porque amo a los hombres y tú sabes, hay tantos hombres maravillosos y hermosos que nos apoyan en el mundo. Pero existe esta cosa que no podemos negar».
“Hustlers» podría también ser la interpretación más radiante y majestuosa de López en el cine desde la película de 1998 “Out of Sight» (“Un romance peligroso») de Steven Soderbergh. Como Ramona, es la cabecilla matriarcal de una familia improvisada de strippers.
(Cardi B hace su debut en la gran pantalla como parte de un elenco que también incluye a Lili Reinhart y Keke Palmer).
López, al igual que su personaje, es una emprendedora del Bronx. Se identificó al instante con Ramona, pero las escenas de nudismo en el filme también le resultaron sobrecogedoras.
“Fue aterrador. Leí el guion y no habían pechos por todos lados, eso no era lo suyo», dijo López sobre Scafaria.
“Pero también sabía que estaba interpretando a una stripper y soy una mamá y qué significa todo eso, y mis hijos. Pero me sentí bien respecto a cómo ella quería contar la historia y que era algo de lo que podía sentirme orgullosa».
Scafaria, de 41 años, guionista de “Nick & Norah’s Infinite Playlist» (“Nick y Norah – Una noche de música y amor»), observó cómo López dedicó horas de entrenamiento para este rol. Aunque la actriz y cantante es una bailarina experimentada, el “pole dancing» era algo completamente diferente.
Su primera aparición en la película es bailando en el escenario al ritmo de “Criminal» de Fiona Apple mientras los hombres en el público la bañan en billetes.
“Fue como hacer gimnasia acrobática. Tuve que empezar a levantar más pesas, tuve que cambiar mi cuerpo», contó López.
“Le dije (a Scafaria), `tengo que cambiar mi cuerpo si hago esto’». “Y yo le dije, `por favor no. No sé de qué estamos hablando’», agregó la directora riendo.
Tan sólo en los dos últimos años, López ha lanzado canciones en español y una línea de cosméticos, se comprometió con el expelotero Alex Rodríguez y recientemente terminó una gira de 38 conciertos.
La revista Time la ha incluido entre las 100 personas más influyentes del mundo. Y en 2018 la cinta “Second Act» demostró que el público aún la adora al recaudar 72,2 millones de dólares alrededor del mundo. También figura como una productora de “Hustlers».
“La gente piensa `ay, ella no es una cantante seria’, o `ella no es una actriz realmente seria’, o `no es una emprendedora realmente seria’. No, yo me tomo todo esto con mucha seriedad. Por eso he pasado la mayor parte de mi vida haciendo tantas de estas cosas como puedo», señaló López.
“Como hago todas esas cosas, a veces no me dan el crédito, y está bien, no me importa. Amo lo que hago, tengo la vida más increíble, me siento bien respecto a mi vida, respecto a donde estoy».
“Pero en cierto modo he tenido que darme a mí misma esa palmadita en la espalda: `Lo estás haciendo bien’», agregó. “Una vez que empecé a hacer eso, me cambió la vida entera».
“Hustlers», sin embargo, le ha merecido grandes elogios a López. Scafaria dice que el papel de Ramona “le queda como un guante, aun cuando no es un guante que no se ha probado del mismo modo».
La interpretación ha catapultado a López a la conversación de los premios de la temporada. La actriz de 50 años dice que un Oscar sería “un momento tremendo» para ella.
“Una dedica toda su vida a hacer lo que ama, y lo hace porque le gusta. Pero también es bonito cuando alguien dice, `hey, nos parece que lo haces de maravilla’», dijo López. “Ni siquiera quiero pensar en eso. Cuando lo hago se me aguan los ojos».