En 2024 hubo más 200 casos sospechosos de sarampión en el país; todos negativos

Santo Domingo. – El año pasado, en el país se registraron más de 200 casos sospechosos de sarampión, los cuales, al ser evaluadores, dieron todos un resultado negativo a este virus, según informó la directora de Inmunoprevenibles por Vacunas (DIV), Aida Lucía Vargas.

«Decimos que en el país no tenemos, al momento, notificación de casos de sarampión, o sea, circulación del virus, porque estamos buscando y no encontramos», especificó.

Y es que con la alerta por el surgimiento de casos por la enfermedad luego de la pandemia, producto de una baja en la cobertura de vacunación durante este periodo, el Ministerio de Salud Pública ha venido tomando medidas, que van desde fortalecer la inmunización hasta la vigilancia epidemiológica en puntos de entrada al territorio.

Así lo indicó Vargas, quien explicó que «en el 2022, dada la situación del Covid-19, que bajaron las coberturas, hicimos una jornada de vacunación contra sarampión y rubéola para población de uno a cinco años, en la cual vacunamos a 934,329 niños, para lograr una cobertura de 98.2%».

Al 2023, esa cobertura fue de 93.6% y de 94.2% el año pasado.

Recordó que República Dominicana está certificada por la Organización Panamericana y Mundial de la Salud (OPS/OMS), como país libre de circulación del virus del sarampión, rubéola y síndrome de rubéola congénita desde el 2016.

La galena reiteró el llamado a los padres para que lleven a sus hijos a cualquiera de los 1,400 puestos de vacunación a nivel nacional y así evitar que los infantes tengan el riesgo de infectarse.

Vigilancia

En cuanto a la vigilancia epidemiológica, aseguró que las autoridades del Ministerio de Salud han tomado medidas en conjunto con el clúster turístico en provincias como La Altagracia, Santo Domingo, Puerto Plata y Samaná, así como las fronterizas Elías Piña, Dajabón y Pedernales, para la notificación de personas con sospechas y signos de la afección.

Esto también incluyó vacunación del personal en los bares, restaurantes, hoteles, transporte turístico para evitar que si llega un turista afectado por el virus haya casos secundarios.