Santo Domingo.- Una delegación de empresas brasileñas está visitando la República Dominicana para estudiar posibles inversiones en el país que podrían ascender a 1.000 millones de dólares.
Las eventuales inversiones abarcan los sectores defensa, tratamiento de residuos, energía, inmobiliaria y transporte, entre otros, según explicó este martes a Efe el abogado João Paulo Todde, quien representa a un grupo de diez compañías brasileñas.
El principal proyecto, valorado en cerca de 200 millones de dólares, contempla la construcción de plantas de tratamiento de basura, que serían establecidas por medio de una licitación, en el marco de la nueva Ley de Residuos Sólidos aprobada el año pasado en el país antillano.
En el área de defensa, las empresas brasileñas están interesadas en ofrecer vehículos blindados ligeros, drones, sistemas de cartografía para trazar mapas de las fronteras marítima y terrestre y sistemas de reconocimiento facial, entre otros.
También hay en estudio un proyecto para la construcción de centrales hidroeléctricas pequeñas y otro para la apertura de un centro logístico en el puerto de Caucedo (cercano a Santo Domingo) destinado a la importación de madera brasileña.
Todde afirmó que existen planes para establecer una cámara de comercio binacional en Brasil, similar a la que ya existe en República Dominicana, y que nacería con al menos 200 empresas brasileñas.
En su visita al país, la delegación brasileña se ha reunido con el ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera; el director del centro de inteligencia militar C5i, contraalmirante Luis Rafael Lee Ballester; el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, y otros legisladores.
También tiene previsto reunirse con el ministro de Industria y Comercio, Víctor ‘Ito’ Bisonó, y el director ejecutivo de Alianzas Público-Privadas, Sigmund Freund.
Los empresarios brasileños también van a visitar la zona de Bahía de las Águilas (suroeste), donde el Gobierno dominicano pretende impulsar un nuevo proyecto turístico sostenible, y los tradicionales polos turísticos de Punta Cana y La Romana, para estudiar proyectos inmobiliarios.