MEMPHIS, Tennessee.- “En realidad es la única opinión que cuenta” aseguró el actor Austin Butler refiriéndose al momento en que Lisa Marie Presley declaró su interpretación como Elvis Presley en el filme nuevo de Baz Luhrman como la única que ha logrado capturar la esencia de su padre en pantalla.
“La realidad del caso es que eso fue un momento bien especial para mi” aseguró el joven actor visiblemente conmovido. “El proceso de filmar ‘Elvis’ me ha dado muchos momentos inolvidables, pero ese específicamente. Estar en Graceland rodeado de la familia y sus amistades. Y que luego su propia hija dijera eso. No puedo hablar de ese momento sin querer llorar”.
Para poder plasmar la vida y el legado musical de Elvis Presley en la pantalla grande la aprobación de la familia fue el primer paso. “Eso podría percibirse como parte de un proceso largo y tedioso. Pero para mí ha sido como un sueño maravilloso. Algo verdaderamente mágico” explicó el cineasta Baz Luhrman durante la rueda de prensa para promover el filme de Warner Brothers que llega esta semana a los cines en Estados Unidos y Puerto Rico.
“Recuerdo exactamente el momento en que me enteré que Elvis había muerto. Yo estaba en la parte de atrás de un autobús publico en Australia. Y lo primero que pensé fue, eso no debió haber pasado. porque yo voy a conocer a Elvis Presley. Eso obviamente no pasó, pero el proceso de poder contar su historia y de ser invitado a ser parte de la familia es algo extremadamente importante para mí y una experiencia de vida verdaderamente especial” aseguró el director de “Moulin Rouge” y “Strictly Ballroom”.
Según Luhrman la clave para ganar el favor de la familia fue aceptar que “había cosas que simplemente no eran negociables. Sea ver a Elvis en tarima en Las Vegas o verlo en su especial de Navidad del 68. Mucho de lo que íbamos a dramatizar no venía con espacio para inventar. Tenía que ser idéntico a como fue de verdad” Ese requisito llevo al cineasta a dar con la clave para que su película no fuera como una biografía musical tradicional.
“Trabajar en esta película fue un poco al revés, porque hubo que encontrar la forma de contar la historia de quien él fue más allá de las recreaciones. Elvis Presley no es un dios y tampoco es un disfraz de Halloween. Tener eso claro fue el primer paso para poder plasmar su humanidad y mostrar todas las formas en que ésta estaba presente en su carrera como artista” aseguró el director.
Como el actor que tenía que tratar de capturar el lado humano detrás del rey del rock and roll, Austin Butler admitió que la exactitud de las recreaciones fueron como “caminar una cuerda floja. Porque como intérprete uno se puede obsesionar con los ruidos que hacía durante sus interpretaciones, como era su risa, sus expresiones faciales, los movimientos de sus manos y el resto de su fisico en estos momentos icónicos de nuestra cultura popular. Todo eso es bien técnico. Pero lo distintivo de esta película es conocer a Elvis de una forma mucho más intima. Ver el hombre detrás de todas esas interpretaciones espectaculares es genuinamente emocionante y lo que hace que esta película sea toda una experiencia para el público, los que son fanáticos o los que lo van a conocer por primera vez con esta producción”.