En su segunda temporada completa en las Mayores, el dominicano Elly de la Cruz representará a los Rojos en el Juego de Estrellas por primera vez en su carrera.
De la Cruz, de 22 años, probablemente traerá su electrizante juego al Clásico de Media Temporada que se realizará en Arlington, Texas. El quisqueyano ya ha fijado un ritmo histórico a su campaña del 2024.
El fenómeno de la escuadra de Cincinnati es el único miembro del equipo que ha jugado en cada uno de los 91 encuentros este año. El infielder lleva una línea ofensiva de .251/.344/.813.
Además, encabeza a los Rojos en jonrones (15) y a todo MLB con 45 bases robadas, que son más que los totales de cinco conjuntos (Gigantes, Yankees, Bravos, Tigres y Azulejos). Lleva un paso a estafarse 77 almohadillas, que sería la mayor cantidad desde que el también dominicano José Reyes se robó 78 en el 2007 con los Mets.
Tras el juego del domingo, De la Cruz se enteró que fue elegido al Juego de Estrellas y reveló que está aprendiendo “un poco de japonés” con la esperanza de platicar con el otro integrante del conjunto de la Liga Nacional, Shohei Ohtani, durante las festividades.
“Significa mucho”, declaró De la Cruz. “Primero que todo, quiero agradecerle a Dios por la oportunidad de lograr todo esto. Significa mucho para mí”.
“Es bien merecido”, expresó el manager de los Rojos, David Bell, quien será uno de los coaches de honor del piloto del Viejo Circuito, Torey Lovullo. “Todo el equipo estuvo muy entusiasmado por Elly, primero que todo por la persona que es Elly. Ha sido un fantástico compañero. Todos los días es una alegría estar junto a él, y desde el primer día de los entrenamientos primaverales, ha trabajado para mejorar en cada aspecto del juego”.
De la Cruz indicó que la mejoría de su temporada como novato a su segunda campaña en las Grandes Ligas es algo de mucho orgullo hasta ahora y que ha resultado en una convocatoria al Juego de Estrellas. ¿Pero cuál ha sido su mayor logro?
“Primero que todo, mi inglés”, reconoció De la Cruz, quien comenzó a responder en inglés durante las entrevistas con los medios antes del inicio de la campaña. “Segundo, los ajustes que he podido hacer. Esos pequeños que buscas hacer cuando inicias el año”.
De la Cruz, oriundo de Sabana Grande de Boya, República Dominicana, es el primer ligamayorista con por lo menos 14 cuadrangulares, cinco triples y 40 bases robadas previo al receso por el Juego de Estrellas desde que el Clásico de Mitad de Temporada comenzó en 1933.
“Sólo quiero ir ahí y divertirme”, exclamó De la Cruz. “Se siente genial, pero también me siento agradecido con Dios por haberme dado todas estas habilidades para dejarlo todo en el terreno y por haberme dado esta oportunidad de trabajar duro y llegar hasta donde estoy ahora”.
Y es que los méritos están ahí para De la Cruz, quien batea .306/.368/.613 en sus últimos 16 juegos con tres cuadrangulares, cuatro dobles, tres triples y ocho bases robadas.
De la Cruz también lleva paso de conectar 27 vuelacercas, con la oportunidad de convertirse en el cuarto Rojo de Cincinnati en tener una temporada de 30 cuadrangulares y 30 bases robadas, y el primero desde Brandon Phillips en 2007.
La semana pasada, De la Cruz se convirtió en apenas el tercer ligamayorista con 15 jonrones y 40 bases robadas en los primeros 85 juegos de su equipo. La hazaña también fue lograda por el venezolano Ronald Acuña Jr. en 2023 y por Rickey Henderson en 1986 y 1990.
“El muchacho continúa mejorando en todas las áreas del juego y obviamente tiene un futuro brillante”, agregó Bell. “Pero ser reconocido a medio camino por lo que ha hecho, desde el final de la campaña pasada hasta el día de hoy, es genial ser reconocido y recompensado por darlo todo en el terreno, incluso a su corta edad”.
De la Cruz es uno de 17 jugadores en el roster de 35 que fueron convocados por primera vez al Juego de Estrellas en la Liga Nacional.