“Los comedores de patatas”, es un pintura de Vincent Van Gogh (1853-1890), pintor holandés, en ese trabajo nos muestra una clara intención de denuncia social, de la penumbra, la pobreza de esa época.
Sus vivencias entre la población minera y su sensibilidad ante el sufrimiento ajeno le llevan a pintar este tema.
Una noche caminando por varios puntos de la ciudad Santo Domingo, vi relejado este cuadro, que me llamo a compasión.
Las personas no reflejan esa dignidad que debe tener el ser humano, esta es una pintura real, de la miseria que viven nuestras gentes.
Los buhoneros que no ven progresar sus negocios, pícher de guagua que trabaja de sol a sol buscando una monedas, pedigüeños que toma su alimento de las sobras del caminante, la prostituta que no encuentra un camino diferente, la mujer sentada en el pavimento con los ojos taciturnos, los niños que cenan junto con sus padre en la mesa de la mercancía, los jóvenes que pierden sus tesoros en los juegos clandestinos, etc.…
Lo primero que sintió mi corazón era su necesidad espiritual y lo segundo es que a ellos les pertenece parte del país.
Ellos están abandonado a la suerte de la providencia, no se ve un futuro promisorio, este mal va de generación en generación, porque este cuadro tiene muchos años pintado en nuestro país.
Cuando Jesús caminó en la tierra el también miro a la multitud con compasión, pero también predicó para que las personas vivieran una vida justa, Cristo vino a darle dignidad al hombre, el Sermón del Monte es una clara enseñanza de Jesús para la convivencia humana (Mateo 5-6-7.).
Decora tu rincón: Jeremías. 29:13 Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová…