Elecciones andaluzas: la extrema derecha irrumpe en el Parlamento y cambia el escenario político

Elecciones andaluzas: la extrema derecha irrumpe en el Parlamento y cambia el escenario político

Elecciones andaluzas: la extrema derecha irrumpe en el Parlamento y cambia el escenario político

Los resultados de las elecciones autonómicas celebradas este domingo en la comunidad autónoma española de Andalucía, han roto todos los pronósticos de las encuestas, según nuestro análisis se convierten en unos resultados históricos por varias razones: la primera y la más preocupante es la irrupción en el Parlamento andaluz del partido ultraderechista Vox, que de no tener ninguna representación política ha obtenido 12 escaños.

Por otra parte, ya es noticia que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) a pesar de ser el partido más votado y ganar las elecciones, ha obtenido los peores resultados de su historia y se queda con 33 diputados, 14 menos si lo comparamos con las elecciones de 2015, cifras que no contaban las encuestas, y que podrían dejar al PSOE sin la presidencia de la Junta de Andalucía por primera vez en 40 años, ya que de forma ininterrumpida había mantenido una hegemonía en la región.

Si seguimos comparando los actuales resultados en Andalucía con los de las anteriores elecciones del 2015, vemos que el Partido Popular (PP) también ha protagonizado una importante pérdida de escaños, de 33 que tenían se quedan con 26. Por su parte la coalición Adelante Andalucía (Unidos Podemos e Izquierda Unida) han perdido 3 escaños y se quedan con 17. Sin lugar a dudas el partido que mejor fortalecido ha salido en esta contienda electoral  es Ciudadanos, que de tener 9 diputados en 2015 pasa a tener 21.

Ahora el escenario político se complica, para gobernar Andalucía con mayoría absoluta se necesitan 55 escaños, pero ninguna de las de las fuerzas políticas que participaron en la contienda electoral pudo alcanzar la citada cantidad, por lo que a partir de ahora se abre un proceso de negociación y de pactos para acordar quién se queda con la presidencia en Andalucía. Desde esa perspectiva indiscutiblemente está claro que Vox y Ciudadanos marcarán la agenda política y mediática del proceso.  

De las negociaciones pueden salir varias fórmulas, pero aquí dejo dos: la primera que se baraja es la de un posible gobierno de derecha encabezado por el Partido Popular, Ciudadanos y Vox que sumarian 59 escaños, lo que daría como resultado que por primera vez en la historia un candidato del PP gobierne la Junta de Andalucía. La otra opción pero más difícil de que se pueda materializar sería la alianza entre: PSOE, Ciudadanos, y Adelante Andalucía.  

Analizado quién podría gobernar en Andalucía, quedan dos grandes preguntas que muchos analistas nos hacemos ahora: ¿desde dónde han salido los votos obtenidos por la ultraderecha de Vox?, y ¿por qué el PSOE podría perder su hegemonía después de mantenerse por cuatro décadas de manera ininterrumpida en Andalucía? Tratamos de responder brevemente: esos 400,000 votos obtenidos por Vox aparentemente una gran parte vienen de los votantes descontentos del Partido Popular y la pérdida de confianza de la ciudadanía en los partidos tradicionales. Con relación a la segunda interrogante hablaba esta mañana con el sociólogo español Dr. José A. Ruiz San Román y me decía que “el votante socialista no ha ido a votar por hartazgo o por castigar”.  Coincidimos en que una gran parte del votante socialista opto por la abstención, ya que la participación electoral de los comicios se situó solo en el 58,65 %.

En conclusión, las encuestas electorales han fallado una vez más, ahora un quinto partido entra con fuerza en el juego del escenario político español (Vox). Desde nuestra visión creemos que estos resultados inesperados en Andalucía con la irrupción de la extrema derecha en el Parlamento andaluz representado con Vox, que ha superado incluso las propias expectativas de la formación política, deja mucho para reflexionar en la clase política y ciudadana, no solo en la comunidad autónoma, sino para el resto de España y Europa.