¿El toque de queda es la solución?

¿El toque de queda es la solución?

¿El toque de queda es la solución?

Claudio Caamaño Vélez

Junto al derecho a la vida, la libertad es uno de los derechos más importantes para el ser humano.

Tanto así, que limitar la libertad es el castigo impuesto a quienes cometen crímenes y delitos.

La reciente agudización del toque de queda, limitando aún más el horario de circulación, es una respuesta a la incapacidad de las autoridades de evitar las aglomeraciones, que es el verdadero problema.

De hecho, restringir el horario hace que los establecimientos comerciales cierren más temprano y por ende, si la misma cantidad de personas debe acudir en una franja de tiempo menor, habrá más personas por unidad de tiempo, es decir, más aglomeración: lógica elemental.

¿Qué le hace pensar a las autoridades que quienes irrespetaban el anterior horario, van a respetar este?

Mientras más estricto sea el toque de queda, más resistencia harán las personas a cumplirlo. Hasta el libro de El Principito, un cuento para niños, lo plantea en el planeta del rey.
Mientras tanto, la inmensa mayoría de los dominicanos que han sido obedientes a las autoridades, pagarán por los errores de algunas personas, y sobre todo, por la incapacidad de las autoridades de hacer valer su autoridad.

Este “palo asechao” con el nuevo horario traerá inevitables repercusiones. Por mi parte lo cumpliré obedientemente. Sócrates planteaba que los buenos deben respetar incluso las leyes injustas, para no dar la razón a los malos de violar las leyes justas.

Por suerte lo que está limitado es la libertad de tránsito, y no la libertad de expresión… Aunque “eto´no se sabe donde vaya sa´parar”.