En un instante tu aliento de vida se detuvo
Y fue como un suspiro
Las aves dejaron de cantar
Las personas en las calles dejaron su trajinar
Y todas las urgencias no lo fueron más
No sabía qué decir
Esto pasaba a los demás, nunca a mí
Y mientras dentro de mí, mil preguntas me asaltaban
Tu rostro yacía plácido, ya en infinita paz
No había angustias, solo satisfacción de la misión cumplida
Al verte así descansar con la suave inquietud
De quién dio todo lo mejor que pudo dar
Mi alma se despidió así, sin más, no te dije nada, porque ese silencio amoroso, fue lo mejor que pudo darte mi alma desolada