El sector privado genera el 86 % del empleo en el país, afirma el CONEP

Santo Domingo.– República Dominicana ha logrado avances significativos en su desarrollo económico, posicionándose como la séptima economía de América Latina en 2023, con un crecimiento promedio del Producto Interno Bruto (PIB) de 5.2 % durante los últimos 50 años.

No obstante, persisten desafíos estructurales que limitan el desarrollo sostenible del país. Entre ellos, la urgente mejora de la calidad educativa, la optimización del gasto público, la reducción de la informalidad laboral y empresarial y el combate a la competencia desleal.

Así lo expresó Celso Juan Marranzini, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), quien también destacó la necesidad de eficientizar la gestión municipal y el ordenamiento territorial como pilares fundamentales para el progreso.

“Son temas que requieren una visión de largo plazo, donde todos los sectores trabajen juntos para proteger lo que hemos construido y conquistar lo que aún nos falta”, afirmó Marranzini durante la celebración del 62 aniversario del CONEP y el Día Nacional de la Empresa Privada.

En el ámbito educativo, Marranzini subrayó que, a pesar de las inversiones realizadas en los últimos años, los resultados siguen siendo insatisfactorios.

Citó el informe PISA, que revela que más del 70 % de los estudiantes dominicanos no alcanzan los niveles mínimos en matemáticas, lectura y ciencias, lo que a su juicio demuestra la urgencia de una reforma educativa basada en la excelencia docente, la evaluación continua y el uso estratégico de la tecnología.

“El sector privado desempeña un papel fundamental en la economía nacional, ya que genera el 86 % del empleo, aporta el 85 % del PIB y representa el 90 % de la inversión nacional”, enfatizó Marranzini.

En ese contexto, reafirmó el compromiso del sector empresarial de seguir colaborando con el gobierno y la sociedad civil para alcanzar los objetivos trazados en la Estrategia Nacional de Desarrollo y el Plan META 2036, que busca duplicar el tamaño de la economía dominicana en los próximos años.

Para avanzar hacia esa meta, Marranzini propuso la creación de un pacto nacional que permita trazar una ruta de desarrollo a largo plazo, abordando reformas fiscales, educativas y laborales, y fomentando la formalización de la economía.

Este pacto, señaló, debe estar sustentado en principios de transparencia, rendición de cuentas y continuidad del Estado, más allá de los cambios de gestión gubernamental.