El Presidente no tiene tiempo

El Presidente no tiene tiempo

El Presidente no tiene tiempo

Santiago Estrella Veloz

Los problemas de la migración ilegal haitiana son más serios de lo que trasciende, pero el Presidente Medina no tiene tiempo para explicarle al pueblo qué ha hecho el Gobierno para ponerle freno.

Ni para hacer una “visita sorpresa” a la zona fronteriza para constatar la situación personalmente, hablando “con el pueblo llano”, no con quienes se benefician del trasiego humano y del contrando.

El Presidente no dispone siquiera de quince minutos para explicar al pueblo qué hace el Gobierno para combatir la corrupción en todos sus aspectos, para evitar que nos sigan tildando de ser uno de los países más corruptos del mundo.

Cada día suben los precios de los artículos de primera necesidad, hasta límites intolerables, pero el pobre pueblo, exhausto, sabe que no puede pedirle al Presidente que haga algo para evitalo, simplemente porque no tiene tiempo.

Los barrios marginados de Santo Domingo y otras poblaciones se ven acosados por múltiples problemas, entre ellos la escasez de agua, pero al carecer de tiempo, el Presidente no puede informarle a sus electores en qué quedará las prometidas presas de embalse de Madrigal y Montegrande, que serían un gran paliativo.

Las ciudades están llenas de basura, en perjuicio de la salud, pero uno no puede esperar que el Presidente censure públicamente a los alcaldes, que deberían sentir vergüenza.

El Presidente no tiene tiempo para convocar a la disfuncional Comisión Presidencial de Política Farmacéutica Nacional para que frene la escalada de precios de las medicinas, aunque de comisiones estamos hartos desde hace tiempo.

La lista es larga, pero igual que el Presidente no tengo tiempo para ampliarla. Sin embargo, tengo la ventaja de que no fui electo por el voto popular para rendir cuentas de una gestión, de manera que puedo dormir tranquilo.