Ciudad de México.- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, rechazó ayer “polemizar” con la Iglesia católica tras un pronunciamiento en el que advirtió de riesgos al Estado de derecho ante las elecciones del 2 de junio y mientras líderes religiosos negocian una tregua con grupos criminales.
“Vivimos en un país libre y no se limita a nadie su derecho a expresarse, a manifestarse, a reunirse, a asociarse, y llevamos muy buena relación con la Iglesia católica y con todas las iglesias, y no vamos nosotros a polemizar con las iglesias porque también eso podría ser una estrategia de los publicistas”, expresó.
La tensión entre líderes religiosos y el crimen organizado creció este año en México. En febrero la violencia obligó a iglesias cristianas a cerrar en al menos 10 municipios de Chiapas.