El dinero es y ha sido parte esencial de la existencia de los seres humanos y el punto primordial para que unos pocos países con economías robustas, influyan en todas las formas sobre una gran mayoría.
No hay una sola actividad en el mundo actual, y creo que siempre ha sido así, que no esté regida o motivada por un gran componente económico.
Ante esa realidad sostuve, y continúo manteniendo, el criterio de que es muy difícil, por no decir imposible, que un personaje en capacidad de generar decenas de millones de dólares con el montaje de un espectáculo prefiriera irse al retiro definitivo, así por así.
Y el tiempo siempre da o quita la razón, y en el caso de Floyd Mayweather está demostrado que el poder que genera el dinero pesó más que sus reales, o no, intenciones de retirarse.
Ya es un hecho, aunque todavía hay algunos cabos sueltos, que es cuestión de días hacer el anuncio oficial con fecha y todo, del combate entre Floyd y el peleador de artes marciales Conor McGregor.
Este enfrentamiento será un acontecimiento extraordinario, por la calidad y cantidad de publicidad envueltos, además de que al público le resultará extremadamente atractivo.
Creo que como pelea será un show de mala calidad, pero que llenará las expectativas de fanáticos deseosos de ver a dos gladiadores con altísima popularidad alrededor del mundo.
Tras este espectáculo, donde de seguro le darán el triunfo a Floyd, entonces comenzará, ahí mismo, a promoverse el combate frente a Manny Pacquiao, otro show que también generará todos los millones del mundo.
RADAR.- No hay crimen perfecto, porque siempre deja huellas, y tarde o temprano sus ejecutantes caen en las garras de la justicia.
El doble asesinado de los comunicadores Leónidas Martínez y Luis Manuel Medina, el martes en San Pedro de Macorís debe haber dejado rastros suficientes para que la Policía aprese al o los responsables.
Tengo la convicción de que nuestra policía científica, es una de las más preparadas del área del Caribe, y cuando se centran en un caso muy pocos se salen con la suya.
Por lo tanto se hace perentorio hallar a los culpables de este horrendo asesinato, que ha puesto los pelos de punta a toda la sociedad, porque el sicariato y los asaltos se han convertidoaquí en un popular “deporte”.