Existe un nivel extremadamente alto de frustración entre los ciudadanos debido a la situación de vulnerabilidad, un aumento continuo de la delincuencia y una posible expansión de la violencia en el presente futuro.
Nuestra Policía sigue involucrada en los típicos problemas de siempre: en situaciones de corrupción, problemas operativos y morales, que son típicos de los departamentos de Policía de América Latina. Los datos sobre delincuencia en nuestro país son pocos confiables y no tenemos el personal policial suficiente según los estándares de los EE. UU. Tampoco estamos mejor capacitados que otras policías.
He aquí un ejemplo a seguir en la prevención del delito. El Plan de William Bratton. Él fue el oficial de policía y alto funcionario estadounidense responsable del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York de 1994 a 1996. El alcalde Rudolph Giuliani le pidió que dirigiera el departamento de Policía.
La inspiración de Bratton es que los policías no deben ignorar las pequeñas faltas, delitos o conductas antisociales de las personas. Estas conductas desviadas deben ser combatidas apenas se manifiestan para evitar que posteriormente estas mismas faltas se conviertan en grandes delitos. Deben disuadir a los delincuentes, con las medidas más drásticas.
En mayo de 2002, el Grupo Bratton de Nueva York fue contratado por el alcalde de Lima Alberto Andrade, con la finalidad de evaluar los problemas delictivos y el cumplimiento de la ley y desarrollar un plan general de acción para el Cercado de Lima y Lima Metropolitana.
El término más escuchado en las reuniones y entrevistas sostenidas por el Grupo Bratton fue la impunidad: “Los criminales actúan con impunidad”, “la policía no captura a los criminales”, “las leyes no sancionan los delitos menores”.
Dentro de las recomendaciones más importantes del Grupo Bratton, podemos mencionar las siguientes: 1) Desarrollar un sistema de administración policial basado en información para la ciudad que sea similar al sistema Compstad utilizado con buenos resultados en Nueva York.
Compstad emplea una combinación de estrategias de patrulla dirigidas e investigaciones concentradas, ambas basadas en datos exactos y actualizados sobre la delincuencia. 2) Seleccionar y establecer un distrito modelo, donde se pueda experimentar con una serie de métodos y procedimientos nuevos que contribuyan al mantenimiento del orden público.
Dentro del distrito modelo, los departamentos de la Policía Nacional y el serenazgo deberían comenzar a experimentar con el despliegue conjunto de unidades.
3) Establecer un nuevo sistema de denuncia de delitos. Los comandos de la Policía necesitan información confiable y oportuna sobre los delitos que se están cometiendo, dónde y cuándo ocurren éstos a fin de planificar respuestas y estrategias efectivas. 4) Establecer sistemas para la administración de casos de investigación.
5) Las investigaciones cumplen un papel decisivo en el trabajo policial y mantienen una conexión entre la Policía y las comunidades que esta protege.
Estas investigaciones transmiten un mensaje a los delincuentes: que la Policía llegará a los barrios para identificarlos y encontrarlos. Conjuntamente con un sistema de patrullas y respuestas ante emergencias bien diseñado, los investigadores pueden detener los patrones de delincuencia y ayudar a lograr la permanente reducción de los mismos.
Y 6) Establecer archivos accesibles con información sobre delitos, que puedan utilizar fácilmente las unidades de investigación descentralizadas en las comisarías, constituiría una herramienta altamente efectiva para llevar a cabo el esfuerzo de combatir los problemas de robos y hurtos generalizados.