El pez diablo no tiene depredador, ideal para el consumo humano

El pez diablo no tiene depredador, ideal para el consumo humano

El pez diablo no tiene depredador, ideal para el consumo humano

En distintas culturas lo aprovechan en suculentos platos. fuente externa

SANTO DOMINGO.-El pez diablo como se le conoce coloquialmente en el país (Hypostomus plecostomus) es una especie exótica invasora originaria de Suramérica y que habita en aguas dulces pocos profundas, no tiene depredador, pese a su alta tasa de reproducción.

En cada lugar donde ha llegado, sea a través de las corrientes del agua desde Costa Rica, Argentina, especialmente Perú, Panamá, Colombia, Venezuela, Ecuador, Argentina, Uruguay, Paraguay, Guyana o ha sido introducido como en República Dominicana, México y Puerto Rico, entre otros países, le dan distintos motes.

Entre estos pez diablo, chupa algas, pez limpiavidrios y peceras, pez gato, chupapiedras, corroncho, y carachama, bagre, etc.

“La especie en cuestión puede alcanzar hasta 70 centímetros, pero en acuario no suele pasar de los 30 y puede vivir hasta 15 años.

Es omnívoro y nocturno, sale de su escondite a comer, durante el día permanece quieto y oculto”, detalló el biólogo Nelson García Marcano, de la Dirección de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Afirma el experto que se trata de una variedad que no cuenta con escamas y protege su cuerpo con cartílagos y espinas, que utilizan como defensa, lo cual dificulta el ser depredado por otros animales.

Al igual que ha ocurrido con otras especies invasoras, no ha encontrado un depredador natural, y se ha convertido en una plaga incrementando su número y diezmando severamente las poblaciones de peces nativos y endémicos, además de que su presencia provoca un cambio en la composición de algas verdes dominantes a diatomeas, o de diatomeas a algas verdeazuladas, las cuales son tóxicas para algunas especies.

Su éxito
“Eso obedece a que tiene mucho éxito en alimentarse de los huevos y crías de otros peces como tilapia y otras especies, creando una situación crítica para los pescadores de la región”, comentó García Marcano.
De ahí que el biólogo resalta la necesidad de promover el consumo de esta especie como alimento, tal como lo están aprovechando en muchos lugares.

Aboga por la participación de diferentes sectores de la sociedad, enfatizando en los usuarios directos de los recursos pesqueros, concientizar sobre los efectos ecológicos y económicos de las especies invasoras.

Cito, por ejemplo, que fruto de ese fenómeno ya hay quejas de pescadores que dependen de la pesca en ríos, ya que afecta directamente su economía y las cadenas alimentarias.

Daños
En la laguna de Saladillo, Montecristi, el pez diablo ha mermado la reproducción de camarones y otras especies. Pescadores de la zona han analizado que hacer dada la proliferación. Sin embargo, se debe resaltar que en otros lugares sacan provecho de esta con la elaboración de suculentos y nutritivos platos en base al mismo.

Provecho económico

— Dieta
García Marcano afirma muchas culturas aprovechan el pez diablo en la elaboración de caldos y fritos acompañado de vegetales y viandas. Sugiere pescadores saquen provecho para contribuir al control.