Santo Domingo.-Diversas reacciones ha encontrado el documento de un grupo de intelectuales y activistas que exigen la renuncia del presidente Danilo Medina por la conmoción política causada por los sobornos pagados por la empresa Odebrecht a funcionarios y exfuncionarios para la adjudicación de obras del Estado.
Los firmantes señalan en el documento que las confesiones de Temístocles Montás y Ángel Rondón dejan claro que el poder se sustenta en el lavado de dinero, la manipulación mediática, el maridaje entre los grupos fácticos y económicos, la complicidad y el control de las instituciones del Estado.
“Una aventura”
Para el representante de la Alianza Dominicana contra la Corrupción (Adocco), Julio César de la Rosa Tiburcio, el pedimento constituye una aventura por parte del grupo firmante, porque en nada contribuye al fortalecimiento de la democracia.
De la Rosa lamentó que ciudadanos que poseen respeto y han contribuido al fortalecimiento de la democracia y la institucionalidad en la República Dominicana estén haciendo ese tipo de pedimento, “porque pudiera eso ser el detonante de una situación que pudiera llevar al país a una inestabilidad que nadie desea”.
“Nosotros recomendamos a los dirigentes políticos que están haciendo este tipo de pedimento que esperen a las elecciones de mayo de 2020 para que ahí puedan lograr cambiar el gobierno que actualmente tenemos, pero en nada contribuye al fortalecimiento de nuestra democracia el hecho de que se interrumpa un mandato constitucional”, reiteró.
Manifestó que exigir la renuncia de un presidente constitucionalmente elegido para un periodo de cuatro años que deberá culminar el 16 de agosto de 2020, en nada contribuye a la democracia.
Además, agregó que no se sabe en qué puede caer el país al momento de demandar el adelanto de elecciones cuando no ha ocurrido ningún acontecimiento que pudiera ameritar la interrupción de un mandato legalmente establecido.
Una de las firmantes
Pero la politóloga Olaya Dotel, una de las firmantes del documento, considera que el Gobierno ha caído en la ilegalidad y que el caso de Punta Catalina es una prueba de delito, debido a que es un pago a los recursos y el apoyo recibido a través del publicista Joao Santana y todas las contribuciones que obtuvo, de lo que dijo la sociedad fue testigo de todo el desborde que hubo en la campaña del presidente Medina.
Contrario a Julio César de la Rosa, entiende que lo que sería una aventura es mantener el actual sistema de endeudamiento para pagar una obra sobrevaluada y cargársela a la sociedad.
“La aventura es mantener un gobierno ilegal. La democracia no es más que el camino a través del cual se fortalece el ejercicio de los derechos de los ciudadanos y lo que estamos hablando es de que el pueblo se exprese y eso nunca será aventura”, añadió.
Consecuencias no deseadas
La opinión de Vinicio Castillo Semán al respecto es que la salida apresurada del poder vía renuncia traería consecuencias impredecibles que nadie debe desear.
“Pero al mismo tiempo el Presidente tiene que entender que está en los momentos más difíciles como gobernante.
Debe dar notación clara y contundente de que no tiene un plan de instaurar una dictadura continuista más allá del 2020 a través de una nueva reforma constitucional que le permita buscar una nueva reelección, ni mucho menos obstruir una reforma electoral, la ley de partidos y un Tribunal Superior Electoral de consenso con toda la oposición”, indicó.
Sostuvo que lo procedente es un pacto nacional del presidente Medina, el PLD, toda la oposición y la sociedad civil para un acuerdo político de consenso.