A veces a favor, otras pocas en contra, pero he apreciado que casi siempre ha actuado convencido de que está defendiendo los mejores intereses de la nación. No fui un aliado incondicional del montaje en el país de los XIV Juegos Panamericanos Santo Domingo 2003, de hecho decidí no trabajar en la justa aunque estaba en un gobierno de mis afectos, que por cierto cumple 15 años el 1 de agosto venidero.
Sin embargo, estuve a favor de que se levantaran instalaciones deportivas en el Mirador del Este, porque hasta ese momento era un espacio perdido, repleto de malezas y un escondite de atracadores. Di plena cobertura, considero imparcial, para “Listín Diario”, de las grandes jornadas que se libraron (marchas, protestas, vigilias, huelgas de hambre, etc.) para evitar que se interviniera el parque, aunque al final se impuso la voluntad gubernamental que estuvo representada por Miguel Vargas, entonces secretario de Obras Públicas.
A pesar de ciertas desidias de la dirigencia deportiva la comunidad ha salido gananciosa con el levantamiento allí de la infraestructura deportiva. ¿Quiénes estuvieron al frente de esas protestas a favor del medio ambiente?
En primer plano el padre Rogelio Cruz, quien es un abanderado de proteger los mejores intereses de la sociedad, aunque a veces luzca equivocado. Justo es mencionar en esas luchas a Peter Morales Troncoso, Juan Cruz Triffolio y Jaime David Fernández, quien paradójicamente después le tuvo que dar “besitos” como ministro de Deportes.