El Moscoso Puello presenta deterioro en su estructura

Santo Domingo.-Los aparatos para esterilizar están dañados, escaleras rotas y desgastadas, ascensor descompuesto y sin puerta, habitaciones para seis personas y con un solo baño, es la radiografía del hospital Francisco Moscoso Puello, que refleja su franco deterioro.

La antesala del área de los consultorios, ubicada en el primer piso, se convierte en un mercado público en las primeras horas de la mañana por la gran demanda de servicios. Esto a raíz del cierre del hospital Luis Eduardo Aybar, que está en construcción.

La temperatura en esa área va aumentando en la medida que el sol sube, ya que ese espacio no tiene extractor de aire caliente.

Allí se dan cita todas las personas con sus distintas enfermedades a esperar ser atendidas. Mientras el bullicio y el sonar de los abanicos luchan entre sí para dominar el espacio.

En medio de ese escenario, y muy al fondo se escucha a una enfermera llamar a todo pulmón a un paciente que le tocaba su turno para consultarse, quien nota al entrar que ese espacio carece de agua al igual que todos los restantes que ofertan servicios.

Al preguntar al personal de salud de turno la razón, responden que tienen cerrada la llave de paso del agua a los consultorios porque se inunda la recién remodelada emergencia.

Mientras, las enfermeras van al baño que está en ese mismo piso y buscan agua y cargan en cubetas, poncheras y galones el agua que requieren para mantener el espacio de los consultorios aseado.

Al dirigirse al segundo piso se puede observar uno que otro escalón roto.

Al llegar a ese nivel te chocas de frente con el ascensor, el cual está descompuesto, fuera de funcionamiento, abierto y con un cono como advertencia.

Las personas que esperan respuesta de sus pacientes que están para cirugía improvisaron una sala de espera, colocando cartones en el suelo para sentarse. Los pabellones donde se alojan tanto a hombres como mujeres internas son espacios que tienen seis camas y solo un baño para todo el que allí está en recuperación.

No tienen cortinas corredizas que les permita tener privacidad. Los aires acondicionados no funcionan así que en cada espacio hay un abanico tratando de mitigar el calor.

De acuerdo a los facultativos consultados, de cinco quirófanos que tiene el centro sanitario ubicado en la avenida Nicolás de Ovando, solo funcionan dos. En ocasiones porque se daña algún aparato o se infecta el área, lo que provoca el cierre y que las cirugías que son electivas tarden más tiempo en realizarse.

Los instrumentos para realizar los procedimientos quirúrgicos no son esterilizados, en el segundo piso, cerca de los quirófanos, porque los aparatos están dañados. Así que el personal se ve en la obligación de bajar al área de la maternidad, del primer piso, que aún está cerrada, y utilizar el autoclave (aparato para esterilizar por vapor) para limpiar los equipos.

En esa área de maternidad el aire acondicionado estaba muy frío sin ser necesario, pues aún no funciona, mientras que en otras áreas, como la de atención ambulatoria, el calor sofoca a quienes allí atienden. Es lamentable ver incubadoras modernas para recién nacidos sin ser usadas, al igual que otros equipos.