Santo Domingo.-El nuevo tramo de la línea 1B del Metro de Santo Domingo desde la estación Mamá Tingó a Punta de Villa comenzó a ser una realidad, y a un mes de que el presidente Luis Abinader diera el primer palazo para el inicio de los trabajos se han levantados dos cerchas metálicas de las pilas que soportarán el piso de rodamiento del tren.
Como habría de esperarse, hay júbilo entre residentes del lugar, expectativa de mejoras y también incertidumbre entre comerciantes, que sólo saben que tienen sus inmuebles marcados por la Oficina para el Reordenamiento del Transporte.
Este jueves, propietarios e inquilinos, dijeron está previsto que las autoridades les hablarán del proceso y las afecciones que implicará la obra de 2.5 kilómetros lineales.
Con la misma, la Opret, que dirige Rafael Santos Pérez (Rafa), se busca reducir a la mitad la distancia recorrida en vehículos y a unos diez minutos la movilidad, además de acercar a los usuarios a la circunvalación Santo Domingo por bifurcación de Mata San Juan.
Brigadas contratistas trabajan en el desmonte de la isleta central frente al parque Jesús Galíndez para dar paso a la infraestructura ferroviaria que implicará una inversión de US$178 millones y beneficiará a más de 373 mil personas. “Esperando a ver qué pasa con los negocios, pero sé que es progreso”, reaccionó Fausto Martínez, propietario junto a Yajaira Samuel de una lavandería en el sector Carlos Álvarez.
Trayecto tendrá una duración de 36 meses
Detalles.
Entre las facilidades del nuevo tramo del Metro figura una cochera-taller de trenes y un edificio de parqueos, ubicados estratégicamente para el aparcamiento de los vagones y vías de mantenimiento.
La obra tendrá una duración de 36 meses. “Contará con una estación cerca del Centro Educativo Ramón Matías Mella y otra en San Felipe”, adelantó Rafa Santos vía la Dirección de Comunicaciones, a cargo de Joel García.
“Esta expansión no sólo mejorará la conectividad, sino que promoverá un transporte más limpio y eficiente”, dijo Abinader en el primer palazo.