San Cristóbal.-Cristian Pozo Mojica (El Matatán) viene de una familia en la que varios hermanos tienen asuntos pendientes con la Justicia: uno está preso y otro anda prófugo.
Pozo Mojica, calificado por el Ministerio Público como el principal distribuidor de drogas de San Cristóbal, es tenido por sus compueblanos como un hombre dadivoso y generoso con los más necesitados.
Pese a ser, supuestamente, uno de los “mini narcos”, muchos de los lugareños del barrio Las Flores, en San Cristóbal, lo describen sin tapujos como un individuo “muy tranquilo”, pero otros lo califican de “bellaco”.
Cuentan que los días de las Madres hacía una celebración para las mujeres del barrio y si alguien necesitaba algún tipo de ayuda, allí estaba él, generoso al mejor estilo de los narcos, con lo que se ganaba la simpatía y lealtad de los moradores del sector donde tenía sus negocios.
Unos adolescentes de la zona desde que ven a los periodistas salen en defensa de “El Matatán” y como si fuera una proeza uno de ellos relata con orgullo: “Yo le lavaba su jeepeta desde que llegaba y me pagaba por eso. Es una injusticia lo que le están haciendo”.
El negocio llamado “Pozo de Mojica” o “El Matatán de las frías” ayer estaba cerrado.
En los alrededores los moradores estaban a la expectativa, en especial luego de la visita al lugar del procurador General de la República, Francisco Domínguez Brito.
“El Matatán”, con apenas un octavo grado y 38 años de edad, tiene acumulada una fortuna tan grande que solo en los bienes incautados se contabilizan 40 millones de pesos.
Uno de los más antiguos moradores del sector narró que “El Matatán” cuando era más joven vendía arroz en una pequeña camioneta. Cuando, presuntamente, se dedicó a los negocios ilegales empezó a tener problemas con los policías de la zona y fue entonces cuando decidió poner negocios en el sector Las Flores y comenzó a pagarles a las autoridades.
Pozo e s padre de cuatro niños, el menor de ellos tiene dos años. Aunque no residía en el sector Las Flores, hacía vida en los alrededores, pues ahí era donde tenía sus negocios lícitos e ilícitos. Las autoridades tenían más de un año investigándolo, hasta que finalmente lograron apresarlo.
Algunos en el barrio dicen extrañar el dinamismo económico interrumpido por el cierre de los negocios y el arresto de “El Matatán”.
Pozo instaló negocios en lugares pobres
A pesar de que Cristian Pozo Mojica alias “El Matatán” supuestamente traficaba con marihuana y crack, según las investigaciones de las autoridades nunca pudieron probarle nada ante un juez, porque las pruebas eran manipuladas.
Sólo el año pasado le iniciaron seis procesos por delitos de porte de arma ilegal, homicidio y droga, pero misteriosamente la manipulación en las pruebas para sustentar la acusación siempre lo beneficiaban.
Algunos lugares donde Pozo Mojica instaló sus negocios son áreas con una gran pobreza. Los bares generaron empleos, y permitieron que muchos se ganaran la vida, en algunos vendiendo frituras o en otros “vendiendo” su cuerpo.