Buenos Aires.- El juicio por el fallecimiento del exfutbolista argentino Diego Armando Maradona, cuyo inicio estaba previsto para el 4 de junio, fue aplazado ‘sine die’ y podría llegar a suspenderse en un futuro no lejano, informaron este lunes fuentes judiciales a EFE.
La causa que investiga las presuntas negligencias médicas en la muerte de uno de los mayores ídolos del fútbol argentino, por la que están imputadas ocho personas, está “técnicamente suspendida» -aunque aún no ha habido una comunicación formal al respecto- por las apelaciones que interpuso una de las enfermeras implicadas, Dahiana Madrid.
La Cámara de Apelaciones en lo penal de San Isidro, localidad de la provincia de Buenos Aires donde iba a tener lugar el proceso, dio la razón al recurso de la defensa de Madrid que pedía que, como está previsto en la ley, el juicio debía celebrarse con jurado popular y no con jueces técnicos, como era el caso.
Además de estos escollos que han ido lastrando el comienzo del juicio, la importancia informativa del caso y la cantidad de partes implicadas están haciendo valorar la posibilidad de trasladarlo a un recinto más grande e idóneo para que “todo el mundo lo pueda ver y analizar”, según las fuentes. Asimismo, el pleito también presentó protestas en torno a las pruebas periciales efectuadas, si bien las fuentes consultadas aseguran que estas no tendrán relevancia y fueron desestimadas.
Una de ellas aseguraba que la muestra de orina de Maradona era insuficiente para ser analizada, cuestión que fue malinterpretada por un error en el acta judicial que establecía la cantidad disponible y no la que sería analizada. Dichas muestras fueron documentadas y filmadas; por ello, su cuestionamiento no será relevante en la causa.
Pese a todo esto, el juicio sobre la muerte del ‘Barrilete Cósmico’ no debería de tardar más de cuatro meses en comenzar, estimaron las fuentes. El ‘Pelusa’ falleció el 25 de noviembre de 2020, 25 días después de cumplir 60 años.
La autopsia al cuerpo del excapitán y exseleccionador de Argentina determinó que murió como consecuencia de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada». También se descubrió en su corazón una “miocardiopatía dilatada».
El campeón del mundo en México 1986 padecía problemas de adicción al alcohol, había sido ingresado en una clínica de La Plata -donde era el entrenador del Gimnasia y Esgrima- el 2 de noviembre de 2020 por un cuadro de anemia y deshidratación y, un día después, fue trasladado a un sanatorio de la localidad bonaerense de Olivos, donde fue operado de un hematoma subdural. El 11 de noviembre de 2020 recibió el alta hospitalaria y fue trasladado a una casa de las afueras de Buenos Aires, donde falleció.