SANTO DOMINGO.-El juanete que su nombre científico es hallux valgas, es una protuberancia visible en el dedo grande del pie que provoca dolor, dificultades para calzarse y no es nada estético.
El ortopeda y cirujano Marcelo Puello, explica que esto se forma cuando el dedo gordo del pie hace presión sobre el dedo adyacente y provoca que la articulación del primero se agrande y sobresalga.
La piel que recubre el juanete o la protuberancia, prosigue el especialista, podría enrojecerse y doler. “Usar zapatos ajustados y angostos podrían empeorar esta condición” agrega a la descripción.
El galeno puntualiza que este también pueden aparecer como consecuencia de un defecto estructural heredado como la extensión de la piel o de una enfermedad artritis rematoidea, refiriendo que puede ser heredado a través de la madre o el padre, quienes pueden tener el defecto y ser hereditario.
Los síntomas
Puello cita que además de la protuberancia en la base del pie, la cual es bastante evidente, también causa dolor, inflación y enrojecimiento. Explica que por lo regular las personas que tienen esta condición buscan ayuda medica básicamente por la parte estética y sobre todo se observan en las mujeres y en los jóvenes.
“El dolor continuo en el pie y la dificultad para encontrar zapato que acomode a esta protuberancia o en otros casos cuando los dedos se superponen, es decir, uno encima del otro, son síntomas complica al paciente”, dice.
Destaca que existen muchas teorías entorno a la causa de que produce el juanete así que la causa exacta de que lo produce se desconoce, “así que podría ser hereditario, deformidades presentes al momento de nacer.
Otros expertos difieren sobre el tema del calzado y el taco alto. También el juanete podría estar relacionada con cierto tipo de artritis”.
El tratamiento
Expone que la teoría del calzado es atribuida a que generalmente las mujeres son las que usan zapato con tacos muy altos. Pero los hombres no usan ese tipo de calzado y pueden presentar los mismos problemas.
El ortopeda indica que dependiendo de la condición del paciente se le pondrían algún tipo de tratamiento.
El uso de plantillas y separadores de los dedos son de las alternativas en casos muy leves y que pudiesen ayudar a mitigar el dolor pero no corregirán la deformidad.
Resalta que por lo general este tipo de deformidad lo trata el cirujano ortopeda traumatólogo y en los hospitales donde hay unidades ortopédicas las personas con esa condición pueden acercarse a los especialistas para que le hagan la evaluación de lugar.
Casos frecuentes
— Limitaciones
El 90% de estos pacientes son mujeres, siendo las limitaciones más frecuentes el dolor medial sobre la prominencia ósea, el dolor plantar bajo la cabeza de los metatarsianos y la aparición de ortejos en garra.