¿Alguna vez has soñado con viajar a todos los países del mundo?
Menos de 300 personas han realizado ese sueño; tres han estado en todos los países dos veces; dos lo hicieron sin regresar a casa.
Pero sólo una lo ha hecho sin volar, dice el autor de tal hazaña.
«Mi nombre es Torbjørn C. Pedersen, que es un nombre terrible para un viajero. Pero eso nunca me detuvo, sencillamente llámame Thor», se presenta el danés en su website Once upon a Saga (Érase una vez una saga).
Y cuenta que lo inspiró algo que dijo el científico danés Piet Hein: «Uno debe viajar para comprender que el mundo es redondo».
Hace unos 9 años dejó su hogar para convertirse en un trotamundos, y partió con el objetivo de no volver a casa antes de haber completado el periplo.
Eso sí, tenía unas reglas simples: pasaría al menos 24 horas en cada país y no tomaría ningún avión. Recorrería el mundo por tierra o agua.
«No compraré, pediré prestado ni alquilaré un vehículo para ir de A a B y definitivamente no tengo chofer. Así me aseguraré de pasar mucho tiempo con lugareños y viajeros, ¡una forma increíble de ver el mundo!», escribió.
Le tomó 3.512 días recorrer todos los países del mundo, viajando a pie, en automóvil, autobús, tren y barco.
Y ese «todos» abarca más que la lista oficial de países de la ONU, cuyo número de miembros es 193 más dos Estados observadores; Thor dice que ha visitado 203 países y también ha incluido territorios en disputa en su lista.
La aventura comenzó a las 10:10 am del 10/10 de 2013 y originalmente estimó que finalizaría en 2018, pero el destino hizo que terminara completándola 5 años más tarde de lo anticipado.
En mayo de 2023 llegó a las Maldivas, la nación insular en el Océano Índico, resuelto a disfrutar de un nuevo país por última vez… ya no quedaba ninguno en su lista.
Allá estaba todavía en junio, en Thilafushi, la isla hecha de basura, cuando habló con el programa BBC OS de BBC World Service.
¿Qué fue lo más memorable de tu viaje?
¡Tantas cosas! Casarme por primera vez, casarme por segunda vez.
Ver un cohete dispararse al espacio y darme cuenta de que era la primera vez que veía algo salir del planeta… ¡eso fue un gran momento!
Estar en una tormenta a bordo de un buque portacontenedores, ver ballenas saltar, ser invitado a una boda en Sudán… ¡tanto, tanto!
¿Cómo te las arreglaste para ver a tu esposa? ¿Qué tan complicado fue?
Ella ha ido a visitarme 27 veces en todo el mundo y lo más complicado fue cuando me quedé atrapado dos años en Hong Kong durante la pandemia.
Hong Kong era bastante estricto. No pude subirme a ningún barco y la mayoría de los países a los que tenía que ir habían cerrado sus fronteras.
Y mi esposa no podía venir a verme a Hong Kong porque no estábamos casados y porque yo no era residente. Así que tuve que resolver eso.
Me las arreglé para conseguir un trabajo y convertirme en residente temporal. Y logramos casarnos en línea a través de una agencia en Utah.
No era un matrimonio aceptado en Dinamarca, pero sí en Hong Kong, lo cual era suficientemente para que pudiera procesar el papeleo y enviarle una visa.
Así ella pudo ir y pasamos juntos unos 100 días.
¿Cuál fue el país más difícil de entrar?
Guinea Ecuatorial. Prácticamente me di por vencido. Estuve en aprietos.
Visité 4, 5, 6 embajadas y consulados diferentes tratando de obtener una visa y no me trataban cortésmente o bien.
Crucé fronteras terrestres y en muchos, muchos puestos de control cualquier persona con uniforme hacía de mi vida una pesadilla.
Fue un período realmente difícil.
Me tomó casi cuatro meses entrar en Guinea Ecuatorial.
¿Pero valió la pena?
Bueno, ese fue el país número 100 , así que valió la pena en términos de progreso.
Es un país encantador. Es muy hermoso y la gente que conocí allá era muy, muy amable.
Muchos de nosotros, si tenemos la suerte de viajar, compramos souvenirs. ¿Es algo que haces y luego los envías a casa?
No puedo comprar nada que no quepa en mi equipaje.
En general, no compro souvenirs pues tendría que cargarlos al menos hasta que viera a mi esposa la próxima vez y ella pudiera traerlos a casa.
Pero he recogido algunos recuerdos en todo el mundo y la gente también me ha dado muchos regalos. La gente es realmente amable y generosa.
Como soy un embajador de buena voluntad de la Cruz Roja Danesa, me he reunido con la Cruz Roja en unos 190 países.
Tienen la costumbre de darme tazas de café, así que después de 10 visitas de la Cruz Roja viajo con 10 tazas de café de la Cruz Roja.
Cuando ves los aviones que vuelan por encima, ¿alguna vez piensas: «¡Ay, eso haría todo mucho más fácil!»?
Absolutamente.
No sabes cuántas veces he estado en un muy, muy largo viaje incómodo en autobús y miro hacia un cielo azul y veo un avión y me pregunto, ¿qué estoy haciendo con mi vida en este momento?
Mi viaje en autobús más largo fue de 54 horas. No sé si te puedes imaginar lo adolorido que quedas después de un viaje como ese.
En este largo periodo que llevas viajando, ¿alguna vez te cansaste?
Claro que sí.
No he conocido a mucha gente que haya viajado mucho más de seis meses o tal vez un año completo.
He conocido a algunas personas que lo han hecho durante un par de años, pero eso es casi como encontrarse con un unicornio.
Ese también era mi límite.
Dos años eran suficientes: había conocido a tanta gente, probado tanta comida diferente y todo del transporte, las visas, el papeleo y todas estas cosas… estaba listo para regresar a casa.
Francamente, he querido volver a Dinamarca desde 2015.
Pero me puse una meta y estaba tratando de lograr algo que nunca se había hecho antes.
Pensé que había mucho valor en ello y esperaba que la gente pudiera sacar inspiración y motivación de lo que estaba haciendo.
Así que seguí luchando por lograr el objetivo.
En 2019 estaba realmente muerto de cansancio y no me faltaban muchos países por visitar.
Las compañías navieras me dijeron que podrían llevarme de vuelta en casa en 10 meses pasando por los países restantes.
Y estalló la pandemia, lo que me retrasó otros tres años.
Así que ahora estoy listo y deseoso de volver a casa.
Cuando Thor dejó su hogar hace casi una década no sabía bien cuáles era el propósito de tal aventura.
Pero en el camino, lo fue encontrando, y no fue uno sino varios, dice en su website.
1. «Nadie lo había hecho antes.
«Hacer algo nuevo es emocionante y resulta que sirve como fuente de inspiración y motivación para muchos».
2. He tenido el honor de viajar como embajador de buena voluntad de la Cruz Roja Danesa.
«Como la mayoría de la gente, sabía muy poco sobre ella, pero al escuchar a voluntarios de todo el mundo me sorprendió. Reverencio a los millones de voluntarios que marcan la diferencia en la vida de millones de personas cada día».
3. El mundo no es lo que la mayoría creemos.
«Los principales medios nos muestran la parte sensacional (…). A menudo escuchamos mucho sobre terror, corrupción, conflictos, desastres naturales, muertes, extremistas…
«Afortunadamente descubrí que, si bien el mundo no es perfecto, la mayoría de las personas con las que compartimos este planeta son gente con buenas intenciones.
«La política y la religión son importantes para algunos. Pero a menudo encuentro que estas cinco cosas son mucho más importantes: la familia, la comida, la música, los deportes y hablar sobre el clima.
«Cada país del mundo tiene derecho a ser visto como el mejor país del mundo en potencia».
4. Se puede viajar con un presupuesto bajo.
«A veces siento como una tortura limitarme un presupuesto bajo. A veces quiero una buena cama, más lujo y un bistec grande y jugoso.
«Sin embargo, me atengo al presupuesto porque, según muchos, sus sueños se ven frenados por la falta de tiempo o de dinero o ambos.
«Tienes que hacer tu propio tiempo, pero este proyecto muestra que no necesitas ser millonario para viajar, descubrir culturas y hacer nuevos amigos».
Al final, a Thor lo impulsó la curiosidad, lo animó descubrir cuán asombroso era el mundo y cuánto había por aprender.
Además, lo ilusionó una frase que siempre lo acompañó: Un extraño es un amigo que aún no conoces… «¿A quién podría conocer mañana?«.